El auge de los centros de datos de IA no está en crisis, pero la “pausa” es tendencia en las grandes empresas tecnológicas

Sin embargo, cuando Microsoft canceló los centros de datos planificados en Ohio el mes pasado, se avivaron las dudas sobre si el incipiente auge de los centros de datos ya había fracasado. Un informe de Wells Fargo del lunes pasado, que indicaba que algunos centros de datos planificados por Amazon Web Services estaban siendo reconsiderados, aumentó la ansiedad del mercado.

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Pero la crisis podría haber terminado antes de empezar. Y, en todo caso, una pausa en algunos proyectos de centros de datos se produce en un contexto de gasto que se mantiene sólido .

“Seguimos viendo un escalamiento acelerado de las implementaciones de IA en todo el mercado de centros de datos, con fuertes señales de demanda que refuerzan nuestro crecimiento a corto y largo plazo”, afirmó Giordano Albertazzi, director ejecutivo de Vertiv, proveedor de centros de datos con sede en Ohio.En una conferencia de resultados la semana pasada, sus acciones cerraron la semana con un alza del 22%.

Amazon y Nvidia reafirmaron la semana pasada que el mercado de centros de datos sigue siendo fuerte.

“Realmente no ha habido cambios significativos”, declaró Kevin Miller, vicepresidente de centros de datos globales de Amazon, en una conferencia organizada por el Instituto Hamm para la Energía Estadounidense. “Seguimos observando una demanda muy fuerte, y estamos considerando tanto los próximos dos años como el largo plazo, y las cifras solo seguirán aumentando”.

Esto no significa que el pensamiento estratégico sobre cómo, dónde y cuándo invertir no esté cambiando a medida que el mercado de la IA evoluciona y los avances deben asimilarse. En tan solo seis semanas este año, irrumpió en escena DeepSeek de China, se anunció la iniciativa Stargate del presidente Trump, impulsada por IA, con un valor de 500 000 millones de dólares, y la preocupación por los aranceles y las guerras comerciales conmocionó los mercados.

“Todo esto ha creado un escenario en el que la industria de los centros de datos está haciendo una pausa, en general”, declaró Pat Lynch, director ejecutivo de Soluciones para Centros de Datos de la inmobiliaria comercial CBRE. “Creo que es una pausa temporal”, añadió Lynch, señalando que la cartera de proyectos y su embudo de ventas siguen siendo significativos y que CBRE continúa cerrando acuerdos. “Sigo siendo cautelosamente optimista sobre la demanda futura, sobre todo en lo que respecta a los grandes modelos de entrenamiento de IA”, concluyó Lynch.

Microsoft había prometido una inversión de 1.000 millones de dólares en centros de datos con sede en Ohio, en la misma zona donde Intel ha planeado fábricas de chips, pero el cronograma se ha ralentizado.

Tras una cuidadosa consideración, por el momento no seguiremos adelante con nuestros planes de construir centros de datos en las instalaciones del condado de Licking. Seguiremos evaluando estos sitios de acuerdo con nuestra estrategia de inversión, declaró un portavoz de Microsoft a CNBC.

Un informe de UBS de la semana pasada concluyó que, entre todas las posibles explicaciones para las cancelaciones de centros de datos, lo más probable es que Microsoft se hubiera comprometido en exceso ante el auge de la IA y ahora se estuviera centrando en los proyectos que actualmente tienen más sentido. Señaló que el gasto de capital en arrendamiento de Microsoft se multiplicó por 6,7 en dos años, con obligaciones de arrendamiento de aproximadamente 175 000 millones de dólares. «Microsoft adquirió toda la capacidad de centros de datos en arrendamiento disponible que pudo entre 2022 y 2024 y ahora tiene la visibilidad para eliminar algunos de estos ‘proyectos iniciales’», escribió UBS. «Encontramos la explicación de la ‘pausa de la demanda’ como la menos respaldada», añadió el informe.

Anat Ashkenazi, AlfabetoLa directora financiera describió el entorno de oferta y demanda de la nube como “escaso” tras la publicación de sus últimos resultados el jueves. “Podríamos observar variabilidad en las tasas de crecimiento de los ingresos de la nube en función del despliegue de capacidad cada trimestre”, afirmó. “Prevemos un despliegue de capacidad relativamente mayor hacia finales de 2025″.

“No estamos viendo una disminución de la demanda, sino una reasignación estratégica”, afirmó John Carrafiell, codirector ejecutivo de BGO, gestora global de inversiones inmobiliarias con 83 000 millones de dólares en activos bajo gestión, incluyendo una importante cartera de centros de datos. Las empresas más importantes, afirma, no están reduciendo su inversión, ya que Microsoft, Google, Meta y Amazon planean invertir más de 300 000 millones de dólares en gastos de capital este año, principalmente vinculados a infraestructura de IA. Y, añade, esto no incluye a otras empresas importantes, como OpenAI y Oracle, ambas involucradas en el proyecto Stargate .

“Más que un fracaso, se trata de una reestructuración en un entorno donde la energía, en particular, junto con la fibra óptica, el agua y el terreno, son escasos y estratégicos”, afirmó Carrafiell. La adopción empresarial a largo plazo impulsará la demanda de IA y de centros de datos durante la próxima década. “Aún no estamos en la primera etapa”, concluyó.

La energía es fundamental para los centros de datos , pero no son operaciones listas para usar, ya que requieren grandes cantidades de electricidad para la potencia de procesamiento y ventiladores para mantener la infraestructura refrigerada. A medida que la adopción de la IA generativa pasa de la experimentación inicial a la aplicación a escala empresarial, se intensificará la necesidad de centros de datos de baja latencia y alta eficiencia cerca de los usuarios finales, pero tomará tiempo que las condiciones adecuadas se ajusten a la superficie prevista del centro de datos.

“Los nuevos centros de datos están aumentando de tamaño tan drásticamente que la red eléctrica no puede seguir el ritmo”, afirmó Allan Schurr, director comercial de la empresa desarrolladora de microrredes Enchanted Rock. Hace tres años, un gran centro de datos tenía 60 megavatios, suficiente energía para abastecer a 20 000 hogares, pero ahora, según Schurr, los nuevos centros de datos para todos los usos de la inteligencia artificial requieren 500 megavatios o más.

Este rápido crecimiento del consumo de electricidad se suma a la nueva demanda de la industria manufacturera y la electrificación del transporte, que en conjunto afectan el suministro y la infraestructura. Los centros de datos representan un desafío único para las empresas de servicios públicos, que deben garantizar el suministro de energía a todos los clientes, incluso en momentos de máxima demanda. “Por eso algunas empresas de servicios públicos indican largos tiempos de espera para la interconexión de los centros de datos”, declaró Schurr. “Las empresas de servicios públicos necesitan invertir en nuevas subestaciones y podrían también necesitar ampliar la transmisión y la generación, todo lo cual lleva tiempo”, añadió.

CBRE ha visto cómo los centros de datos pasaban de representar el 2% de su cartera en 2022 al 10% en 2024, y Lynch prevé que esta cifra siga creciendo. La proximidad a la red eléctrica impulsa el mercado actual, ya que los constructores de centros de datos buscan zonas con abundante acceso a la energía. Georgia, Texas y Ohio cumplen con muchos de los requisitos que buscan los constructores, y si una zona no cuenta con la red eléctrica o la capacidad de infraestructura necesarias, necesita poder escalar rápidamente.

“Tener una gran disponibilidad de energía en un plazo de 36 meses es atractivo para los clientes”, afirmó Lynch.

Según Datacenters.com, actualmente el tres por ciento de la energía mundial está almacenada en centros de datos.

Schurr afirmó que los datos de Enchanted Rock indican que hay suficiente energía disponible para satisfacer la demanda la mayor parte del tiempo. De las 8760 horas del año, la red solo sufre sobrecarga durante una fracción de ellas. “Si logramos aliviar la demanda de la red durante esas 100 a 500 horas, se podrán reducir los largos retrasos en la interconexión”, concluyó.

Hay una distinción importante que debe hacerse entre la idea de una desaceleración más amplia y algunas de las pausas recientes implementadas por las principales empresas de tecnología, según el socio principal de McKinsey & Company, Pankaj Sachdeva, quien investiga el desarrollo de centros de datos y espera un flujo y reflujo.

Según modelos recientes de McKinsey, que no incluyen el impacto de las tarifas, se prevé que el mercado de centros de datos crezca entre un 20 % y un 25 % durante los próximos cinco a siete años, pero la tasa de crecimiento variará de un año a otro. «No será lineal», afirmó.

Los cambios arancelarios introducirán nuevas presiones de costos en las cadenas de suministro de IA y centros de datos, en particular con aranceles minerales críticos en el horizonte.

“Estas disrupciones elevarán los costos de hardware, impactarán las estrategias de abastecimiento y obligarán a las empresas a replantear sus modelos de compras a largo plazo”, afirmó John Archer, director sénior de entregas y líder de transformación de la cadena de suministro en Slalom Consulting. A corto plazo, los proveedores de IA y la nube deberán implementar estrategias de mitigación de costos, como la renegociación de los contratos con los proveedores y la optimización del inventario.

“A largo plazo, se puede esperar un impulso hacia la diversificación geográfica, la co-fabricación en regiones con aranceles favorables y una integración más profunda del análisis de la cadena de suministro impulsado por IA para adaptarse a las políticas comerciales en evolución”, dijo Archer.

Un factor que no ha cambiado es que la potencia de procesamiento es actualmente cara y se necesita mucha más para software y hardware de IA, según Suresh Venkatesan, director ejecutivo de POET Technologies, empresa que cotiza en bolsa y desarrolla soluciones energéticas para centros de datos. “El auge de la IA obliga a los centros de datos a encontrar soluciones más eficientes, ya que requiere una potencia de procesamiento tan grande que no se parece a nada que hayamos presenciado”, afirmó. “Si bien un proyecto de centro de datos puede fracasar, es probable que surjan otros, ya que no hay indicios de una desaceleración en la demanda de conectividad”, añadió.

Original de Kevin Williams