Ayer en las bolsas todo se puso de cara...¿será hoy la cruz?

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Nadie esperaba, sin embargo, que el presidente del BCE, Mario Draghi, se convirtiera en el principal protagonista de la sesión, protagonismo que, como luego explicaremos, al final del día compartió con el presidente estadounidense, Donald Trump. Así, y durante su intervención en el foro de bancos centrales que se está desarrollando en Sintra (Portugal), Draghi sorprendió al afirmar que el BCE estaba dispuesto a actuar, implementando nuevos estímulos monetarios, más antes que después, si la situación económica en la Zona Euro no mejora, concretamente si la inflación sigue manteniéndose lejos del objetivo de cerca del 2%, como está siendo el caso. En ese sentido, Draghi dijo que el BCE todavía podría recortar sus tasas de interés, ajustar su orientación, ofrecer medidas de mitigación para contrarrestar los efectos secundarios no deseados de las tasas negativas y que también tenía "margen considerable" para más compras de activos. Estas declaraciones tuvieron un importante impacto en los mercados de bonos y de renta variable de la región, con ambos tipos de activos girando con fuerza al alza. Así, los precios de los bonos subieron AYER con fuerza, especialmente los de los países de la periferia del euro, lo que conllevó una fuerte caída de sus rentabilidades. En un primer momento, en los mercados de renta variable de la Zona Euro fueron los valores de corte defensivo, liderados por las utilidades, los que subieron con fuerza, impulsados por los recortes en las rentabilidades de los bonos. El euro, a su vez, se depreció respecto al dólar.

De este modo, la intervención de Draghi, “amenazando” con nuevos estímulos monetarios, fue muy bien recibida por unos inversores que llevaban tiempo mostrando cierta inquietud por el deterioro del escenario macroeconómico global, deterioro que está siendo superior en la Zona Euro.

Pero si Draghi fue el principal catalizador de las alzas de los mercados durante la mañana, por la tarde el presidente de EEUU, Trump, dio un segundo empujón a los mercados al anunciar que había mantenido una larga y positiva conversación con su homólogo chino, Xi, y que ambos dirigentes mantendrán la semana que viene una extensa reunión en Japón, en el marco de la cumbre del G20 que se celebra en Osaka. Además, Trump dijo que funcionarios de ambos países se reunirán previamente para preparar la reunión, reunión ante la que se mostró muy optimista. Como venimos repitiendo desde hace tiempo, Trump necesita que tanto la economía como los mercados lleguen en buen estado a las elecciones presidenciales de EEUU de 2020 si quiere tener alguna posibilidad de ser reelegido y él sabe que un enquistamiento de la batalla comercial con China podría tener efectos muy nocivos tanto en el crecimiento económico de su país como en las bolsas, por lo que entendemos que intentará, antes o después, cerrar un acuerdo comercial. Lo que no tenemos tan claro que el país asiático esté por la labor, y ello a pesar del evidente impacto negativo que las tensiones comerciales con EEUU están teniendo en la economía china.

Las palabras de Trump, más bien los tweets que publicó, fueron muy positivamente recogidos por las bolsas, aunque en esta ocasión fueron los valores de corte más cíclico los que mejor reaccionaron a las mismas, sobre todo en Wall Street, donde lideraron las alzas, quedándose los de corte más defensivo rezagados o, incluso, cerrando el día con pérdidas.

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Al cierre del día, gracias a Draghi y a Trump, los principales índices de las bolsas europeas y estadounidenses cerraron con fuertes alzas, algo que por la mañana parecía poco probable que fuera a ocurrir, al anticipar la mayoría de los agentes del mercado que la sesión sería de transición y de escasa actividad.

HOY, y tras la muy positiva sesión de AYER, la atención la monopolizará la reunión del FOMC, cuyo resultado no conoceremos hasta por la tarde, ya con las bolsas europeas cerradas. Como hemos venido señalando desde hace días, esta reunión ha generado muchas expectativas, ya que se espera que el banco central estadounidense dé un giro a su actual estrategia de esperar y ver, mostrándose más abierto a una posible actuación en materia de tipos de interés, concretamente a rebajar los mismos en el corto plazo. Al menos esto es lo que están descontando los mercados de valores y de renta fija estadounidense, por lo que el riesgo de que la Fed defraude es elevado. Habrá que estar muy atentos a la publicación del diagrama de puntos en el que los miembros del FOMC dibujan cómo esperan que evolucionen los tipos oficiales en el medio plazo. Hasta ahora el diagrama viene mostrando subidas moderadas de los mismos tanto en 2019 como en 2020 cuando el mercado espera ahora que la Fed baje los mismos. Si no se produce un cambio sustancial en las expectativas de tipos representadas en el mencionado diagrama y el FOMC, en su comunicado, y su presidente, Powell, en la posterior rueda de prensa, no se muestran favorables a bajar los tipos, la reacción de los mercados de renta fija y renta variable puede ser muy negativa.

HOY, y a la espera de conocer el “dictamen” del FOMC, esperamos que los principales índices de las bolsas europeas abran con ligeros ascensos. En principio, esperamos que el día sirva para consolidar los fuertes avances de AYER, siendo factible que algunos inversores se decanten por deshacer posiciones de cara a lo que pueda anunciar la Fed esta tarde.

Analista: Juan J. Fdez-Figares