Incluso Boone Pickens se está desenamorando del petróleo
El venerable gurú del petróleo T. Boone Pickens está repudiando al petróleo. Hace menos de 18 meses, su fondo lanzó un ETF que replica el comportamiento de las acciones de las compañías que se espera se beneficien de cualquier aumento en los precios del crudo Brent. Pero pronto, BOON, el ticker del ETF, ya no existirá. E
n cambio, se relanzará como RENW, ofreciendo exposición a acciones que se benefician de la transición hacia "una economía baja en carbono".
El problema más obvio de BOON fue que, en lo que respecta a los inversores, no había estado a la altura. Subir un 7% menos que el precio del petróleo Brent desde su lanzamiento no es catastrófico. Peor quizás sea el hecho de que el ETF no participó realmente en el repunte petrolero del otoño pasado (menos de la mitad de sus tenencias están clasificadas como compañías "energéticas"). Aún así, eso lo protegió un poco del colapso posterior, a diferencia de los fondos de exploración y producción más expuestos.