Análisis del escenario actual del petróleo: "Los precios del crudo siguen bajo presión"
Los precios del petróleo siguen bajo presión y han vuelto a caer por debajo de los 75 USD por barril. El estado de ánimo bajista del mercado persiste, alimentándose de diferentes cosas, especialmente de la pérdida de impulso económico de China.
La narrativa predominante de ajuste de la oferta está bajo un mayor escrutinio dada su dependencia del crecimiento de China. Dejando a un lado el nerviosismo, las tendencias predominantes deberían persistir: la demanda de petróleo del mundo occidental se estanca, los flujos rusos se establecen fuera del hemisferio occidental y es probable que los suministros de las naciones petroleras continúen superando las cuotas prometidas.
Los precios del petróleo siguen bajo presión y ayer cayeron casi un 5%. El estado de ánimo bajista del mercado persiste y se alimenta de varios elementos. La expectativa de una oferta más limitada a finales de este año se basa en gran medida en la sólida demanda de China. Sin embargo, los últimos datos económicos apuntan más bien a una continua pérdida de impulso. Además de los impulsores cíclicos, se encuentra el rápido cambio del país hacia la movilidad eléctrica, que compensa parcialmente la narrativa de reapertura relacionada con los servicios y socava otros segmentos de la demanda de petróleo. Al igual que en los mercados de gas natural y carbón, las compras de pánico del año pasado probablemente impulsaron las partes menos visibles del almacenamiento global, que existen en muchos nichos diferentes del mercado petrolero. La reversión de tales fenómenos de acaparamiento debería pesar un poco sobre la demanda este año. Curiosamente, el propio mercado parece menos convencido de la narrativa restrictiva predominante como sugieren las curvas de futuros con pendiente descendente. El recorte de suministro de las naciones petroleras anunciado a principios de este año no logró apuntalar los precios de forma duradera. En el caso de Rusia, los datos de envío seleccionados apuntan más bien a flujos de petróleo persistentes a pesar de los anuncios anteriores de recortes de producción, lo que pone a la política petrolera en general bajo un mayor escrutinio. A pesar de los cambios recientes en el sentimiento, los precios del petróleo se mantienen más o menos alineados con las tendencias fundamentales. La demanda estancada de petróleo en el mundo occidental, la creciente producción de esquisto, los flujos sostenidos desde Rusia y la probabilidad de que las naciones petroleras superen las cuotas prometidas deberían dar como resultado un mercado petrolero bien equilibrado a largo plazo. A corto plazo, la política petrolera, los posibles recortes adicionales a las exportaciones y una reversión del estado de ánimo deprimido del mercado parecen ser los principales factores a tener en cuenta. La próxima reunión de petronación la próxima semana probablemente llame mucho la atención. Vemos precios del petróleo en los años 70 en lugar de los 80 a largo plazo.
Norbert Rücker, Jefe de Economía e Investigación de Próxima Generación, Julius Baer