¿Pueden los Estados Unidos interceptar un misil norcoreano?
El programa nuclear de Corea del Norte ha recobrado un gran impulso en los últimos meses, culminando en el lanzamiento de un misil sobre Japón en agosto y la detonación de una bomba de hidrógeno el domingo pasado. Mientras los esfuerzos diplomáticos se estancan, Niall McCarthy de Statista señala que las miradas se han vuelto a la tecnología de defensa de misiles de la región.
A pesar de ser la primera línea de defensa de Corea del Sur contra un ataque nuclear, el sistema THAAD del Ejército estadounidense ha demostrado ser polémico en el país ya que los ciudadanos que viven en las áreas que rodean a las lanzaderas puedan convertirse en objetivos norcoreanos. La prueba nuclear más reciente ha llevado al Ministerio de Defensa del país a desplegar los cuatro lanzadores THAAD restantes, además de los dos ya en operación.
Esa decisión puede estar bien fundada, considerando que el sistema THAAD tiene una tasa de éxito del 100 por ciento en intercepciones de prueba. Eso de acuerdo con la Agencia de Defensa de Misiles de los Estados Unidos, quien dice que el sistema alcanzó 13 objetivos en 13 intentos hasta mayo de 2017 (así como otra prueba exitosa desde entonces) - ver gráfico adjunto.
Los países de la región también pueden contar con el sistema de misiles Aegis instalado en los buques navales de Estados Unidos y Japón. Actualmente, sus misiles Raytheon Standard no pueden lanzar misiles ICBM pero son capaces de destruir misiles balísticos. Han demostrado ser razonablemente fiables en las pruebas, destruyendo 35 objetivos y fallando en siete ocasiones.
El sistema de misiles tierra-aire de los Estados Unidos Patriot también es utilizado por Corea del Sur y Japón. Cuando se utiliza para alcanzar misiles, tiene un alcance más corto y es más eficaz protegiendo objetivos estratégicos en lugar de áreas más grandes. A pesar de la controversia sobre el récord del sistema de interceptación de misiles iraquíes SCUD durante la Guerra del Golfo, las pruebas anti-misiles han demostrado ser un éxito.
La defensa terrestre de Midcourse es responsable de defender Norteamérica interceptando cabezas nucleares entrantes en el espacio durante la fase de curso intermedio de la trayectoria balística. Hasta ahora, sin embargo, el sistema no ha demostrado ser muy fiable, con una tasa de éxito de solamente 10 de 18 pruebas.