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Pedro Sánchez y Pablo Iglesias han firmado este martes en el Congreso el acuerdo que han alcanzado para formar un Gobierno de coalición progresista "basado en la lealtad" y "para cuatro años". PSOE y Unidas Podemos han defendido la rapidez con la que han acercado posturas (solo 48 horas después de las elecciones) y han asegurado que es "la mejor vacuna frente a la extrema derecha". Es decir, que lo han justificado por el avance de Vox, que se ha convertido en tercera fuerza.

Ha sido el propio Iglesias el que ha hecho la mención velada a la formación que lidera Santiago Abascal, que se ha mostrado muy crítico con el acuerdo diciendo, en un mensaje en Twitter, que el PSOE "se abraza al comunismo bolivariano, a los aliados de un golpe de Estado, en mitad de un golpe de Estado", en referencia a la situación en Cataluña.

Iglesias, en la comparecencia conjunta que ha ofrecido junto a Sánchez tras la firma del acuerdo, ha recordado sus palabras de la noche electoral, insistiendo en que "lo que en abril era una oportunidad histórica se había convertido en una necesidad histórica". De ahí que socialistas y la formación morada hayan alcanzado este acuerdo, cuyo objetivo es la formación de un Gobierno de coalición progresista "que combine experiencia del PSOE con la valentía de Unidas Podemos".

"Es la mejor vacuna frente la extrema derecha", ha dicho Iglesias, que ha agradecido a Sánchez "su disposición para conformar un Gobierno con nosotros". La sintonía, esta vez, era muy buena, y ambos se han prodigado buenas palabras. "Es un verdadero honor poder trabajar para mejorar la vida de nuestros compatriotas", ha remarcado Iglesias, que ha dicho que el líder del PSOE "podrá contar con toda nuestra lealtad" porque "vamos a dejar lo mejor de nosotros mismos". Precisamente este punto, el de la lealtad, era uno de los que Sánchez enarboló hace unos meses para explicar la falta de acuerdo, señalando que la falta de confianza hacía imposible entonces que ambas formaciones se entendiesen.

Iglesias ha explicado que ahora los dos partidos buscarán el apoyo de otras formaciones al acuerdo, para garantizar la investidura y la gobernabilidad, porque este es un acuerdo a largo plazo, para cuatro años. Una idea que también ha expresado Sánchez, que ha señalado que el proyecto político emprendido con la formación morada es "tan ilusionante que supera cualquier tipo de desencuentro" que se haya producido en los meses anteriores.

"El compromiso del PSOE era formar un Gobierno progresista sí o sí", y el acuerdo con Unidas Podemos "recoge las líneas fundamentales de las políticas" que se van a llevar a cabo, como por ejemplo subir impuestos y elevar el gasto social, pero sin aumentar el déficit. "Este nuevo Gobierno va a ser rotundamente progresista, integrado por fuerzas progresistas, y se van a aprobar medidas progresistas. No cabrá el odio y la confrontación de los españoles", ha remarcado Sánchez.

IGLESIAS, ¿VICEPRESIDENTE?

Sánchez ha confirmado, igual que lo había hecho Iglesias minutos antes, que la estructura del nuevo Gobierno, es decir, la composición del Consejo de Ministros, se conocerá "en el momento oportuno". Según el líder de Unidas Podemos, será "tras la investidura". Se rumorea que Iglesias podría ser vicepresidente en este nuevo Ejecutivo, aunque lo cierto es que ninguno de los dos ha hecho referencia a posibles nombres o a cómo se podrían repartir las carteras.

"Es un acuerdo de legislatura" en el que primará "la cohesión, la lealtad, y la solidaridad gubernamental" y que aprovechará "los perfiles más idóneos" para cada cargo, se ha limitado a decir el secretario general del PSOE, que ha confirmado que en los próximos días abrirá una ronda de contactos con los partidos para "lograr el respaldo mayoritario" al acuerdo.

Según ha dicho, los españoles se han pronunciado ya tres veces en las urnas, por lo que tanto PSOE como Unidas Podemos "apelamos a la responsabilidad y generosidad a todas las fuerzas políticas" para lograr el desbloqueo. "España necesita un Gobierno estable, sólido, no en funciones y a prueba", ha insistido el presidente en funciones, que ha agradecido la "generosidad" de Iglesias y ha remarcado que este es un "proyecto ilusionante, emocionante, que va a trabajar por el progreso de España y de los que más lo necesitan".

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