Economía.- La inversión público-privada en tecnología será clave para el crecimiento económico de México, según OBG

El estudio sobre la estrategia económica de México y las nuevas tendencias sectoriales tras la pandemia señala que el país norteamericano ha implementado políticas fiscales caracterizadas por su austeridad, enfocándose principalmente en la redistribución de presupuestos federales sin intentar obtener nuevas líneas de crédito en organismos multilaterales como el Fondo Monetario Internacional (FMI).

Entre otros puntos, el informe destaca que el país ha logrado mantener una economía abierta durante la pandemia, con el objetivo de conservar la actividad económica en sectores clave como el turismo, la manufactura y el comercio exterior. Estas medidas permitieron que México fuese el tercer país más visitado en el mundo en 2020.

Con respecto a la recuperación, el documento de OBG apunta que, en el corto plazo, el ritmo de vacunación será clave para impulsar la recuperación económica del país. Además, México deberá ser capaz de abordar sus vulnerabilidades y desigualdades estructurales para generar una economía más sostenida y equitativa a nivel social y regional, y poder consolidar el crecimiento a largo plazo.

Entre los proyectos de infraestructura que generarán un impacto económico positivo, OBG destaca la construcción de la refinería de Dos Bocas, en Tabasco; el nuevo aeropuerto internacional de Ciudad de México; y los proyectos ferroviarios de la península de Yucatán y del Istmo de Tehuantepec.

Asimismo, el organismo considera que la inversión público-privada en estos proyectos contribuirá a la integración de la región en las cadenas de valor globales y a la reducción de las diferencias regionales.

Por su parte, la recuperación de la industria automotriz, una de las más importantes para las exportaciones del país, será también fundamental para la salud económica a largo plazo del sector manufacturero y de la economía en general.

El editor regional de OBG en América Latina, Harry Van Schaick, ha destacado que las inversiones de infraestructura y tecnología que plantea México "tienen el potencial de acelerar el crecimiento económico en estas dos áreas, cuya actividad se vio ralentizada debido a la crisis".

De su lado, Van Schaick, ha señalado que la digitalización en sectores como el energético o el bancario, pueden corregir vulnerabilidades estructurales del país y aprovechar nuevas tendencias económicas globales.

"Por ejemplo, el enfoque en el segmento excluido del sistema financiero y en nueva demanda por litio y otros minerales, abren nuevas oportunidades de crecimiento en México", ha añadido Van Schaick.