Bielorrusia ha provocado la condena y la indignación de Occidente después de que, según todos los indicios, haya obligado a aterrizar en el país a un vuelo comercial en el que viajaba un activista político y haya detenido inmediatamente al opositor.
El país de Europa del Este, que mantiene fuertes vínculos con Rusia, parece haber obligado a un avión de Ryanair que viajaba a Lituania desde Grecia a aterrizar en su capital, Minsk, para detener al periodista y activista opositor bielorruso Roman Protasevich, que iba a bordo, informa Reuters.
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Bielorrusia ha dicho este lunes que sus controladores aéreos no "obligaron" al avión de Ryanair a aterrizar, y en su lugar dieron "recomendaciones" a la tripulación del avión, añade Reuters citando a la agencia de noticias rusa RIA Novosti.
La agencia de noticias estatal bielorrusa BelTA informa de que las autoridades enviaron un avión de combate MiG-29 para desviar el vuelo cuando se acercaba a la frontera con Lituania siguiendo órdenes del presidente Alexander Lukashenko.
Ryanair ha emitido un comunicado en el que confirma que la tripulación del vuelo FR4978 había sido notificada por el control de tráfico aéreo bielorruso de una posible amenaza a la seguridad a bordo. El avión aterrizó y se realizaron comprobaciones de seguridad, pero "no se encontró nada anormal".
El consejero delegado de la aerolínea irlandesa, Michael O'Leary, ha tachado de "secuestro patrocinado por un Estado" el aterrizaje forzoso en Bielorrusia del avión.
La 'CNBC' se ha puesto en contacto con el Ministerio de Asuntos Exteriores de Bielorrusia para pedirle un comentario este lunes, pero aún no ha recibido respuesta. Sin embargo, el secretario de prensa del ministerio ha dicho a la agencia de noticias rusa RIA que Occidente está sacando conclusiones precipitadas.
"Llama la atención la precipitación de las declaraciones abiertamente beligerantes de una serie de países y estructuras europeas. La situación se está agravando directa y claramente", dijo el portavoz, afirmando que se estaba "politizando deliberadamente".
La Unión Europea (UE) ha confirmado que estudia sanciones contra el país.