- La incertidumbre hace que el organismo esté en modo 'esperar y ver'
El Banco de Inglaterra (BoE por sus siglas en inglés) acaba de anunciar que, tal y como se esperaba, mantiene sin cambios los tipos (en el 0,25%) y su política de compra de activos (situada actualmente en 435.000 millones de libras).
El organismo ha tomado esta decisión en un momento de tensión política en Reino Unido después de que los Conservadores perdieran la mayoría en las elecciones del pasado 8 de junio. Además, este miércoles la Reserva Federal (Fed) estadounidense elevó el precio del dinero por segunda vez en 2017 mientras que el BCE, el pasado 8 de junio, se reafirmó en sus políticas de estímulo aunque también retiró de su discurso la idea de que los tipos podrían verse más bajos en el futuro.
La decisión del banco central inglés se ha tomado por cinco votos a favor y tres en contra. "Lo último que quieren hacer en este momento es distorsionar el mercado", señala Naeem Aslam, responsable de análisis de Think Markets en referencia a los miembros del BoE, y añade que el resultado de la votación muestra "cierto desacuerdo en el Comité, lo que ha empujado a la libra esterlina al alza". En estos momentos, la libra sube un 0,22% respecto al dólar (1,2781). "Tenemos tanta incertidumbre en el mercado que es sorprendente que algunos miembros (del BoE) piensen que deberían aumentar los tipos de interés", añade este experto.
"El banco realmente necesita estar en modo 'esperar y ver", señalan desde Think Markets. "En el futuro, la presión se mantendrá sobre Mark Carney, gobernador del BoE", apuntan.
