"La Nueva Europa nació vieja, pero es irreversible. Hay que atajar la deuda para que no muera…"

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Capitalbolsa | 28 feb, 2017 08:17
viejo

"El peligro no está en los populismos ni en el presidente USA, Trump, ni en los mariachis del Apocalipsis. La Europa Nueva, la Eurozona, nació vieja, porque el entonces núcleo duro peinaba demasiadas canas de senectud. Recuerden que Italia llegó a ser gran potencia mundial, lo mismo que Francia. Alemania, tras la unión (por absorción) de las dos alemanias, tardó en convertirse en lo que es ahora y el resto de los países apenas pintábamos algo. La Nueva Europa ha sobrevivido al gallinero (demasiadas voces) de sus políticos y, lo que es peor, ha logrado conjurar los efectos letales de una burocracia endémica. La Nueva Europa, una Europa Vieja y presa de sus fantasmas y miedos, es irreversible.

Será mejor o peor, con más o menos miembros; con más o menos heridas y laceraciones. No hay marcha atrás. No habrá voladura. Hay muchos focos y otros tantos desagües, que conviene apagar y tapar. El más peligroso está en el ingente volumen de deuda total, aunque haya distinciones, medallas de oro al cumplimiento de sus obligaciones, que es el caso alemán. La deuda creciente nos puede asfixiar. ¿Populismo desbocado? Hay que combatirlo en las urnas. Ya han sido neutralizados algunos intentos ¡Luchemos contra la deuda! El Estado de Bienestar es irrecuperable, por mucho que prometan unos y otros. Salvo que haya confiscaciones de bienes y ahorros", me dice el CEO de una importante gestora de fondos.

Y la bola de nieve sigue rodando en el mundo, no sólo en Europa. La deuda soberana mundial se incrementará en 993.000 millones de dólares (937.974 millones de euros) en 2017, hasta alcanzar un total de 44,307 billones de dólares (41,852 billones de euros), lo que supondrá un nuevo récord histórico, según las previsiones de la agencia de calificación Standard & Poor's (S&P). Según los cálculos de S&P, en 2017 se emitirá deuda soberana a largo plazo por importe de 6,767 billones de dólares (6,391 billones de euros), un 4% menos que el año anterior, aunque el saldo global de deuda se incrementará un 2,3%, hasta 44,307 billones de dólares (41,845 billones de euros). (Leer más)

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