Inmuebles vs relojes de madera. Vuelve el fenómeno que antes arruinó a muchos.
Enzo Martínez
El fenómeno inmobiliario vuelve por sus fueros. Los bancos centrales, con sus políticas monetarias de tipos negativos, han creado una burbuja histórica. En bares y cafeterías de cualquier rincón de España se comentan los trueques y transacciones.
"Ahora que las hipotecas están muy bajas y los alquileres muy altos, me he comprado un par de pisos en la ciudad", dice un pequeño empresario de la sierra madrileña, "porque el dinero está regalado". Este fenómeno es viejo como la codicia y como siempre, llevará a muchos a la ruina. Se ha desplegado una publicidad, sin precedentes ¡y gratuita! gracias al interés desmedido, que siempre genera la ignorancia. Lo escribí hace unos meses, porque algunos de los protagonistas de este fenómeno, que impactará, sin duda en la estructura actual de los bancos y de las finanzas, pero ni al ritmo ni en la cuantía, que estos expertos predicen. Algunos confunden tanto las cosas, que quieren fabricar y vender relojes de madera. La cuadratura del círculo. Ya se sabe aquello de que aquí el más tondo hace relojes (Significa que cualquiera puede hacer una cosa). Tradicionalmente la construcción de relojes era una ocupación para personas muy inteligentes. Cuando decimos que "Aquí el más tonto hace relojes" queremos decir que toda la gente es lo suficientemente inteligente para poder hacer cualquier cosa. También significa que todos son "demasiado" listos, en el sentido de gente aprovechada. (Leer más)