SANTIAGO DE COMPOSTELA, 9 (EUROPA PRESS)
El hombre fallecido en la explosión ocurrida en la mañana de este martes en Vigo a consecuencia de un escape de gas tenía 45 años y era secretario del PP en el distrito vigués de Casablanca.
Fuentes del PP han comunicado a Europa Press que el hombre, Ramón González Sánz, vivía solo en una vivienda ubicada en la sexta planta del número 4 de la calle San Salvador y era un militante "conocido y reconocido" en las filas del PP, donde era "muy activo y querido".
Hasta el lugar de los hechos, que actualmente se encuentra precintado mientras trabajan efectivos de emergencias y de limpieza, se han trasladado varios concejales y miembros del PP, así como el socialista Carlos López Font.
En declaraciones a los medios, el presidente del PP vigués, José Manuel Figueroa, ha trasladado que en el partido están "muy dolidos" por lo ocurrido y ha dado su apoyo a todas las familias afectadas y, en especial, a la de Ramón González, a quien ha calificado como "un compañero excepcional.
Asimismo, la portavoz municipal del PP, Elena Muñoz, ha lamentado "profundamente" esta "gran desgracia tanto como ciudadana" como en su papel de "compañera del fallecido", del que ha dicho que era muy querido en el PP y siempre estaba dispuesto a colaborar. "Es un día muy triste y una pérdida irreparable", ha concluido.
TRES PERSONAS HERIDAS
La deflagración ha causado asimismo heridas a otras tres personas, según han confirmado a Europa Press fuentes del servicio de Urxencias Médicas 061.
Hasta el lugar del suceso se han desplazado una ambulancia medicalizada y dos asistenciales para atender a las víctimas. Dos hombres, F.L.L., de 86 años; y X.M.D.A., de 38 años, han sido trasladados al Hospital Álvaro Cunqueiro; mientras que un tercero, J.A.G.A., de 56 años, ha sido atendido por los servicios sanitarios en la zona sin precisar traslado.
Asimismo, fuentes de la Policía han confirmado que el edificio ha sido evacuado mientras los servicios de emergencias revisan su estructura. Algunos de los vecinos se han reubicado en casas de familiares, mientras que el resto han sido trasladados en un autobús hasta un hotel cercano, donde permanecerán hasta que puedan regresar a sus casas.