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Los principales índices chinos y de Hong Kong han dejado caídas en su mayoría este viernes, en una sesión asiática que ha acabado con signo mixto. El Hang Seng de Hong Kong cayó un 2,9%, mientras que el compuesto de Shangai bajó un 0,77% y el componente de Shenzhen un 1,36%. El CSI 300 bajó un 1,42%.

Las acciones del productor ruso de aluminio Rusal, que cotiza en Hong Kong, subieron más de un 10% en las primeras operaciones, antes de dar marcha atrás y caer más de un 4%. Las acciones cayeron a principios de esta semana después de que la empresa dijera el lunes que estaba evaluando el impacto de la prohibición anunciada el domingo por el gobierno australiano sobre las exportaciones de alúmina y minerales de aluminio a Rusia.

Las acciones de Rusal en Moscú se habían disparado casi un 16% cuando los mercados reanudaron sus operaciones en Rusia el jueves tras un mes de cierre.

Las acciones de JD Logistics se desplomaron más de un 14%, cayendo por debajo de su precio de oferta. En una presentación en la bolsa de Hong Kong por la mañana, la firma dijo que recaudará 8.530 millones de dólares de Hong Kong (1.090 millones de dólares) a través de una venta de acciones. La filial del gigante del comercio electrónico JD.com dijo que las acciones tendrán un precio de 20,71 dólares hongkoneses por unidad.

El índice tecnológico Hang Seng cayó casi un 5%, con Alibaba perdiendo más de un 6%, Tencent cayendo un 2,7%, JD un 6,3% y Meituan hundiéndose un 7%. Los temores de exclusión de la bolsa siguieron en el punto de mira, ya que la Comisión del Mercado de Valores de EE.UU. añadió la plataforma china de medios sociales Weibo a una lista de valores chinos que corren el riesgo de ser excluidos de la lista de EE.UU.

Las acciones japonesas entraron en territorio negativo tras haber subido anteriormente, tanto en el caso del Nikkei 225 como del Topix, que cerraron marginalmente a la baja. En Japón se publicaron datos sobre la inflación, que mostraron que su índice de precios al consumo básico alcanzó su nivel más alto en dos años en marzo, según Reuters.

El S&P/ASX 200 australiano se mantuvo en territorio positivo al subir un 0,26%, con algunas ganancias en las mineras. Los valores surcoreanos lucharon por encontrar una dirección, negociando entre ganancias y pérdidas. El Kospi acabo casi plano.

El índice MSCI más amplio de acciones de Asia-Pacífico fuera de Japón cotizó un 0,88% a la baja.

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