El perfil de la deuda italiana se deteriora preocupantemente
Tras solo ocho meses de un intenso conflicto político, el perfil de la deuda de Italia está comenzando a deteriorarse a medida que el país se ve obligado a depender de subastas locales de bonos a corto plazo y pequeños ahorradores individuales para recaudar fondos.
Con un ratio de deuda del 130 por ciento de la producción económica anual y uno de los programas de emisión de bonos más grandes del mundo, Italia necesita que sus préstamos sean de bajo coste pero también de vencimiento a largo plazo; en general, cuanto más largo es el plazo de la deuda, menor es el riesgo de dificultades de pago.
Hasta hace poco estaba teniendo éxito: el vencimiento promedio de la deuda del gobierno italiano alcanzó los 6,96 años en febrero, el más alto en cinco años. Pero desde entonces, ha estado cayendo y se encuentra ahora en 6.79 años, un mínimo de 18 meses, según un análisis de BBVA de los datos del Tesoro italiano.
La razón es que Italia no ha podido construir una sindicación de deuda, una estructura de acuerdo en la cual los prestatarios designan a los bancos para vender deuda directamente a los inversores internacionales, y en su lugar solo realiza subastas de bonos en el país.