Las bolsas asiáticas han cerrado con signo mixto este martes, dejando alzas moderadas en los parqués chinos y caídas en otros lugares como Australia en una jornada en que se han conocido los datos de gestores de compras del Gobierno chino, que han superado expectativas y han abandonado el territorio de la contracción.
La actividad de las fábricas chinas ha dejado atrás la contracción en el mes de marzo y ha superado todas las expectativas que apuntaban a una recuperación mucho más modesta. El índice de gestores de compras oficial ha alcanzado 52,0, muy por encima del 45,0 esperado y del 35,7 del mes de febrero.
La ampliación del confinamiento en EEUU hasta el 30 de abril y la caída de los precios del petróleo han seguido haciendo mella en las bolsas del continente asiático, que abren con volatilidad y signo mixto una nueva semana en que la operativa apunta a ser tan caótica como en jornadas anteriores. Los inversores siguen tratando de evaluar el impacto de la crisis sanitaria en las economías, lo que aún arroja incertidumbre sobre el panorama en los mercados, y en medio de este panorama, Australia ha cerrado con subidas del 7%, mientras el Nikkei ha recortado las caídas del 3% para acabar con un declive del 1,57%.
La expulsión masiva de corresponsales extranjeros arroja dudas sobre China y el coronavirus, según un informe muy crítico con Pekín publicado por Reporteros Sin Fronteras (RSF). "La expulsión masiva de corresponsales extranjeros paraliza aún más la libertad de información en China", afirma RSF.
