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Los inversores del continente asiático se han dejado llevar por el declive de Wall Street del jueves (Dow Jones -0,30%, S&P 500 -0,17% y Nasdaq -0,13%) y por la tormenta política desatada sobre el presidente de los EEUU, Donald Trump. No obstante el casi nulo resultado de las dos jornadas de negociaciones entre Washington y Pekín sobre su guerra comercial, ha cobrado protagonismo.
Las conversaciones han sido francas y constructivas sobre asuntos comerciales, según ha informado este viernes el Ministerio de Comercio chino, pero la decepción se instala en los mercados, ya que no se ha alcanzado acuerdo alguno. Según Pekín, ambas partes se mantendrán informadas sobre los próximos pasos. Pero el desenlace “envía un mensaje a los inversores de que este conflicto no tiene trazas de resolverse pronto”, señala David Madden, analista de CMC Markets.
El efecto más inmediato se ha dejado notar en las bolsas asiáticas, que han acabado con signo mixto. Los grandes índices de la China continental, Shanghai (+0,17%) y Shenzhen (-0,20%) cierran con resultado desigual y el Hang Seng de Hong Kong cede un modesto 0,22%.
Todavía en Japón, el Nikkei sube un 0,85% después del dato del IPC del país del sol naciente haya aumentado un 0,8% interanual en julio, lo que supone el décimo noveno mes consecutivo de avance, debido principalmente al encarecimiento del coste energético, informó hoy el Gobierno nipón.
En el Pacífico, el ASX200 australiano cierra prácticamente plano, después de que el Partido Liberal australiano haya elegido este viernes al hasta ahora ministro del Tesoro, Scott Morrison, como su nuevo líder, por lo que se convertirá en el nuevo primer ministro del país, tras derrotar a sus otros dos rivales, entre los que no se encontraba el ahora exlíder de la formación, Malcolm Turnbull. El dólar australiano ha vuelto a las subidas, tras la noticia, y avanza un 0,5% después de dos días de declive contra el dólar de EEUU.
Todavía en el mercado de las divisas, el yen se ha desplomado contra el dólar hasta las 111,50 unidades y el euro se mantiene estable en los 1,1570/50 dólares, después del máximo de dos semanas del miércoles, por encima de los 1,1620 dólares.
En otros lugares de Asia, el Kospi surcoreano (+0,46%) y el NZX50 (+0,22%) de Nueva Zelanda acaban en verde, mientras en el rojo se instalan Tailandia (-0,15%), Malasia (-0,50%) y Singapur (-0,79%).
