alcistacbwallstreet

Los mercados están sumergidos en una espiral bajista de la que, parece, van a tener difícil salir. Al menos por ahora. Los expertos de AJ Bell apuntan que todo lo que se ha visto hasta el momento hace pensar que estamos ante un "mercado bajista clásico", pero aún son optimistas y apuntan a la posibilidad de que haya un cambio de rumbo. Y es que, defienden, "nada de lo que ha ocurrido quiere decir que el mercado alcista esté definitivamente muerto y enterrado".

En un comentario, el director de inversiones de la firma británica, Russ Mould, destaca que el mercado bajista que está "amenazando con destruir gran parte de las ganancias de los últimos años se parece a muchas otras caídas que le han precedido". Por lo tanto, afirma, los inversores solo tienen que observar las tendencias clave de anteriores ciclos alcistas y bajistas "para ver qué puede ayudarles a navegar por los mercados en esta ocasión".

Aunque, a su juicio, no hay que darlo todo por perdido. Como dice, "los bancos centrales aún podrían intentar insuflar nueva vida a la larga racha alcista con una política menos ortodoxa", aunque reconoce que ahora mismo "la inflación parece ser su mayor preocupación, no el apoyo a los mercados". Sin embargo, confía en que esto cambie "en algún momento" teniendo en cuenta lo ocurrido en la historia reciente, aunque también deja claro que "es posible que no pueda cambiar lo suficientemente pronto como para evitar nuevos episodios de volatilidad".

Sea como sea, Mould aconseja identificar las fases principales de los mercados bajistas y alcistas para saber cómo actuar en cada momento, o al menos qué es lo que cabría esperar, y para eso apunta como guía al libro 'The Dow Theory' (1932) de Robert Rhea. En él, se esboza de forma clara lo que se considera un mercado alcista y uno bajista.

Sobre el alcista, Rhea comentaba que había tres fases principales: la primera está representada por la reanimación de la confianza en el futuro de los negocios; la segunda es la respuesta de los precios de las acciones a la conocida mejora de los beneficios de las empresas; y la tercera es el periodo en el que la especulación es desenfrenada, un periodo en el que las acciones avanzan por la esperanza y las expectativas.

Para los mercados bajistas, Rhea también identificó tres fases clásicas: la primera representa el abandono de la esperanza sobre la que se compraron las acciones a precios inflados; la segunda refleja la venta debido a la disminución de los negocios y las ganancias; y la tercera es causada por la venta angustiosa de valores sólidos, independientemente de su valor, por parte de aquellos que deben encontrar un mercado de efectivo para al menos una parte de sus activos.

"Los acontecimientos salvajes en los mercados de criptodivisas, y la charla aterradora, al menos en las redes sociales, de personas que se arruinan evocan los malos recuerdos del mercado bajista que se estrelló en 1929", destaca el estratega de AJ Bell, que anima a hacer un ejercicio de reflexión y "observar dónde ha sido más caliente el mercado o, para ser menos amable, más especulativo".

Mould apunta que los mercados alcistas "se resquebrajan primero en la periferia y luego los problemas se filtran a los activos principales, a medida que la confianza disminuye". De hecho, cree que se podría argumentar que "el desmoronamiento de las criptomonedas es una señal temprana de que se avecinan problemas que pueden obligar a los tenedores de criptomonedas a liquidar otros activos para mantenerse a flote (suponiendo que tengan alguno)".

El analista de AJ Bell cree que ahora mismo "hasta los nombres supuestamente 'seguros' y 'fiables' están bajo presión, lastrados por las elevadas expectativas y los precios aún más elevados". Es lo que, de hecho, está ocurriendo con muchos de los valores del Nasdaq, uno de los mercados más golpeados por las ventas en las últimas semanas.

"Para que los mercados recuperen su impulso, deben estabilizarse y comenzar a avanzar", apunta Mould, que cree que cualquiera que busque la "siguiente señal de advertencia" podría mirar a otro sector que ha estado en auge pero que se ha convertido en un vendedor neto, de sí mismo, a través de las salidas a bolsa: el capital privado.

Noticias relacionadas

contador