El mercado espera con ganas la comparecencia del ministro de Finanzas británico, Rishi Sunak, que presentará, este miércoles, un nuevo paquete de estímulos destinado a combatir el desempleo y reactivar sectores clave de la economía británica. En una avance de las medidas que anunciará ante la Cámara de los Comunes, el ministerio ha explicado que el plan incluirá 2.000 millones de libras destinadas a combatir el desempleo de los más jóvenes, que están en mayor riesgo de convertirse en parados de larga duración.
Noticia relacionada
En concreto, esta cantidad subvencionará las prácticas laborales de seis meses para personas entre 16 y 24 años. Además, incluirá 111 millones orientados a triplicar los contratos en prácticas en el período 2020-2021, según recoge 'CNBC'.
Junto con el plan de empleo, se espera que Sunak anuncie una suspensión temporal del impuesto de propiedades que se aplica a inmuebles de más de 500.000 libras, en un intento de estimular el mercado inmobiliario. Está previsto que se anuncien otras medidas como rebajas del IVA y otros impuestos o bonos de vacaciones.
Es el segundo presupuesto especial que lanza el Gobierno de Boris Johnson para paliar los estragos de la pandemia. En marzo, Sunak presentó un paquete de 30.000 millones para frenar el impacto inmediato en el mercado laboral y en sanidad del coronavirus, así como del confinamiento para contener los contagios. Desde entonces, los mercados se han acostumbrado a los importantes anuncios del ministro y a la asistencia adicional del bazuka de política monetaria del Banco de Inglaterra.
Los analistas de Pantheon Macroeconomics señalan que las encuestas actualmente sugieren que el empleo probablemente disminuirá aproximadamente un 4% interanual en el cuarto trimestre, mientras que las encuestas de confianza de los consumidores apuntan a un aumento sostenido en su tasa de ahorro. "Entonces, a pesar de los esfuerzos de Johnson, todavía esperamos que el PIB esté aproximadamente un 5% por debajo de su nivel anterior al Covid para finales de este año".
"La efectividad de la reducción del IVA dependerá en parte de que las empresas transfieran la bajada a los consumidores. En principio, la competencia y la menor demanda pueden significar que los precios caigan y los hogares vean la mayor parte de la reducción de impuestos, pero esto no está asegurado. Igualmente, las empresas podrían utilizar la eventual reimposición del IVA como una oportunidad para aumentar los precios", afirman los analistas de Monex Europe.
