Luis de Guindos, actual vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE), ha afirmado hoy que la intervención de Bankia se produjo en un contexto en el que "nadie se creía las cifras" y "nadie creía los balances bancarios estuvieran reflejando la realidad". El Fondo Monetario Internacional (FMI), mientras tanto, pedía al país "realismo, ajustar las valoraciones de los activos a la realidad y acabar con todas las dudas e incertidumbres del sistema financiero español", pues "era lo que lastraba al conjunto de la economía española".
De Guindos se encuentra declarando este martes como testigo en la causa penal que investiga las responsabilidad.es por la salida a bolsa de Bankia por su papel como ministro de Economía y Competitividad entre diciembre de 2011 y marzo de 2018.
Durante el turno de preguntas de la fiscal Carmen Launa, De Guindos ha justificado sus reuniones con el FMI por su condición de ministro de Economía "en un momento muy delicado para el euro, muy delicado para la economía española y era una situación de muchísima alarma". En esas reuniones, desde el FMI se le comunicó que el principal riesgo para la economía de la zona euro en ese momento era España.
La jefa de la misión del FMI en España, que se encontraba en el país "de casualidad", le transmitió que el real decreto ley conocido como Guindos I iba "en la dirección correcta", pero "puede que no fuera suficiente", que en España había "necesidades de capital próximas a 40.000 millones de euros" y que estaba preocupada por las entidades que habían recibido ayudas públicas. "Dice que hay algún problema específico y señala a Bankia, la entidad más grande, más sistémica y la que más efecto negativo podía tener", ha apuntado.
ENCUENTROS CON EL BANCO DE ESPAÑA
También mantuvo el ministro numerosas reuniones con representantes del Banco de España, concretamente con el gobernador y el subgobernador, que se iniciaron a principios de 2012, al poco de tomar posesión de la cartera de Economía. En esos encuentros, desde el supervisor le trasladaron sus dudas sobre el sistema financiero español en su conjunto, no solamente sobre Bankia.
No obstante, él considera que la entidad era "el caso más problemático del sistema financiero español". "Era una entidad grande, sistémica, que tenía una exposición enorme al sector inmobiliario, un porcentaje de refinanciaciones muy alto, unas necesidades de liquidez enormes del BCE y, además, se había producido la intervención pública de una filial suya, de Banco de Valencia", ha resumido.
"Eran señales de alarma y mi misión como ministro era evitar el colapso del sistema financiero", ha añadido. Por eso, en este contexto, De Guindos ha explicado que, como ministro de Economía, tuvo que "buscar el mal menor" porque "no había soluciones ideales de ningún tipo". "Lo que buscaba, fundamentalmente, era evitar el rescate", ha resumido.
El exministro, que no formaba parte del Gobierno cuando Bankia salió a bolsa, ha valorado que esta decisión fue "un error". "Que la salida a bolsa fue un error nadie lo pone en duda", ha apuntado. No obstante, ha insistido en que él no tenía "ninguna responsabilidad pública" cuando se produjo el debut bursátil de la entidad, en julio de 2011.
La fiscal le ha preguntado si en algún momento el Banco de España le comunicó que Bankia estaba teniendo problemas para formular las cuentas de 2011 en abril del año siguiente y De Guindos lo ha negado. "A mí nunca y a mis colaboradores no le podría decir, pero si hubiera sido el caso mis colaboradores me lo habían comentado", ha explicado.
"TUVE QUE ACTUAR CUANDO FUI NOMBRADO"
De Guindos no ha querido valorar la actuación del Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero para hacer frente a la crisis, pero ha señalado que él tuvo que ponerse manos a la obra en cuanto asumió la cartera económica. "Tuve que actuar en cuanto fui nombrado ministro de Economía", ha dicho.
Ante preguntas de Andrés Herzog, representante de la Confederación Intersindical de Crédito (CIC), De Guindos ha apuntado que "no hay una metodología para determinar cuánto se podría haber ahorrado", pero "darle a la pelota para adelante" no suele ser la mejor solución, en su opinión.