No hay espacio o mejor dicho, si salen adelante todos los proyectos que se han solicitado, el sistema se quedaría sin margen de maniobra. La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) se reunirá el próximo mes de enero con Red Eléctrica (REE). El objetivo del encuentro es tratar de desbloquear la situación que viven el regulador de la red, el del mercado y los más de 150 solicitantes que han visto rechazados sus proyectos por la negativa de la empresa presidida por Jordi Sevilla y que, por ello, han reclamado a la CNMC.
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La reunión, prevista para el inicio del nuevo ejercicio, además, acaba de posponerse porque estaba programada para la pasada semana, según señalan fuentes conocedoras. Ahora se queda para después de Navidades.
El problema de fondo, según indican las citadas fuentes, es que en los últimos años se ha disparado el número de proyectos renovables, por encima incluso de lo que ocurría en tiempos de la burbuja, de las primas y de la crisis, es decir, antes de 2007. Y, por tanto, las peticiones de acceso a la red.
Una solicitudes que, en muchas ocasiones, son rechazadas por Red Eléctrica. Un ‘no’ por parte del gestor único de la red que no en todos los casos estaba lo suficientemente justificado, lo que ha llevado a la CNMC a dar la razón a parte de los proyectos que han reclamado.
EL INTERLOCUTOR ÚNICO
Detrás de esta situación de bloqueo también estaría la figura del Interlocutor Único de Nudo (IUN), creada hace una década y responsable de tramitar las solicitudes de acceso y conexión a la red de las instalaciones de generación renovable (también de cogeneración). En los últimos años, el sector, especialmente el fotovoltaico, ha criticado esta figura, por restar imparcialidad al sistema; e incluso la CNMC ha cuestionado su continuidad.
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El Ministerio de Transición Ecológica también ha ido en la misma línea. En el informe que elaboró respecto a la Circular sobre metodología y condiciones de acceso y conexión a las redes de transporte y distribución de electricidad reconocía que compartía con la CNMC la “apreciación” de “la posible existencia de intereses en el caso de que el interlocutor sea el propietario de algunas de las instalaciones conectadas a través de ese nudo, si bien se considera que dicha posición de dominio podría ser superada mediante la regulación de esta figura”.
“Si la solución finalmente adoptada pasa por la supresión total de esta figura, con el fin de evitar inseguridad jurídica, debería regularse, por el competente para efectuar dicha supresión, en una disposición transitoria qué sucede con los actuales interlocutores únicos de nudo en el caso de procedimientos que ya han iniciado su tramitación”, explicaba el Ministerio.
