Alcoa vuelve a abrir la puerta a alargar las negociaciones del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) previsto para su planta de San Cibrao (Lugo) que, teóricamente concluyen el viernes. Un paquete de despidos que alcanza las 534 bajas, según el planteamiento inicial de la empresa.
La multinacional estadounidense está dispuesta a seguir negociando siempre que haya "avances" en el diálogo con los trabajadores en las reuniones previstas para este miércoles y jueves.
En las últimas jornadas, los representantes de los trabajadores han pedido más tiempo debido al impacto que ha tenido el rebrote de coronavirus en Galicia, en concreto, en A Mariña, que ha conllevado medidas de confinamiento.
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PARAR EL ERE
Además, los sindicatos piden a Xunta y al Ministerio de Industria que paren el ERE y concreten las medidas del plan de industrial que anunció el Gobierno para salvar a la empresa.
Al respecto, el presidente del comité de Alcoa San Cibrao, José Antonio Zan, se quejó de que la multinacional insiste en condicionar la negociación a la parada de las cubas. Asegura que la multinacional está "enrocada" en este planteamiento, pero los trabajadores lo tienen como una línea roja que no están dispuestos a permitir.
Esta semana los trabajadores de Alcoa llevan a cabo un huelga a la que se suman más de 20 empresas contratistas de la compañías, las cuales también se verán afectadas por los despidos si Alcoa cierra la fábrica de aluminio.
