El Gobierno de Pedro Sánchez no está haciendo los deberes ante las alarmas de recesión que se oyen desde finales del año pasado. Así lo creen los analistas de Rabobank, que aseguran que la coalición PSOE-Podemos está tan centrada en sacar adelante promesas como la subida de las pensiones o el incremento del salario mínimo, que provocarán un aumento del gasto, que no presta suficiente atención a la tan necesaria consolidación fiscal.
"Se está prestando muy poca atención a la preparación de las finanzas públicas para la próxima recesión y el rápido envejecimiento de la población", aseguran los expertos de la entidad holandesa, que advierten que eso supone un riesgo, y es que el Ejecutivo se vea obligado a adoptar "duras medidas de austeridad durante cualquier crisis futura" e incluso, a largo plazo, para "pagar los costes del envejecimiento".
Rabobank se muestra muy crítico con el gabinete de Sánchez en su último informe sobre España, y apunta que la necesidad de nuevos recortes puede llegar "incluso en ausencia de cualquier crisis" si el Gobierno no es capaz de equilibrar adecuadamente las cuentas públicas, ante la previsión de un mayor gasto social por las medidas adoptadas hasta ahora.
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De hecho, la entidad financiera estima que las propuestas contenidas en el programa para compensar el aumento de la partida de gastos, como las subidas de impuestos a las rentas altas, el tipo mínimo de Sociedades para las grandes empresas y el impuesto sobre los servicios digitales, la llamada 'tasa Google', pueden no ser suficientes. "Se debe prestar más atención al insostenible sistema de bienestar social y a la reducción del gran volumen de deuda pública", asevera Rabobank.
PROBLEMAS PARA EL GOBIERNO DE COALICIÓN
Los analistas de esta firma vaticinan, además, que el Gobierno de coalición "tendrá dificultades para hacer frente a los numerosos desafíos económicos de España", como el muy elevado desempleo estructural (alrededor del 14%), un crecimiento de la productividad bajo o negativo, y el cada vez más rápido envejecimiento de la población, que hace necesario "introducir urgentemente cambios en el sistema de pensiones para garantizar su sostenibilidad". Por ello, señalan que las perspectivas a medio y largo plazo para la economía española "siguen siendo bastante sombrías".
"El crecimiento se está ralentizando constantemente" y la economía española sigue "perdiendo impulso", indica Rabobank, que habla también de las dificultades que puede traer para el cumplimiento del déficit el aumento del gasto social planteado.
Sánchez ha dicho que quiere cumplir con las normas presupuestarias europeas, pero sabedor de que solo podría hacerlo si lograba que la Comisión Europea flexibilizase los objetivos a lograr, ha pactado con Bruselas una nueva senda de déficit que se dará a conocer este viernes, una vez el Gobierno comunique a las comunidades autónomas la guía a seguir en la reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF).
"Esto sugiere que el Ejecutivo apunta a una política fiscal neutral o ligeramente expansiva, en lugar de una contraria", explica Rabobank, que espera que "en el mejor de los casos" el balance presupuestario mejore en unas pocas décimas los próximos dos años. Y lo mismo ocurre con el ratio de deuda pública, que se sitúa en torno al 97% del PIB, "solo cuatro puntos porcentuales por debajo de su máximo en 2014 a pesar de las muy altas tasas de crecimiento del PIB en los últimos años".
