- Cinco Ligas y tres Champions, entre sus grandes logros
- Sus últimos años le han dejado en el centro de la crítica
El guardameta cierra una etapa de 25 años en el Real Madrid y pone rumbo al Oporto de Julen Lopetegui tras toda una vida dedicada al club blanco. En el camino, muchas alegrías y tristezas para un Iker Casillas que lo ha sido todo.
Después de 25 años vistiendo el escudo del Real Madrid sobre el pecho, Iker Casillas dice adiós al equipo que le ha visto crecer y le ha acompañado en su formación tanto dentro como fuera de los terrenos de juego. El portero se convierte en el último símbolo de la historia del club blanco, un hombre de la casa que ha estado presente en todos los buenos y los malos momentos vividos en Chamartín durante los últimos 20 años.
ESTRENO EN SAN MAMÉS
Todo comenzó el 12 de septiembre de 1999 en San Mamés, donde Iker Casillas asumió por primera vez la responsabilidad de la portería del primer equipo. Un año que jamás olvidará el guardameta y que finalizó con la conquista de su primera Champions League, la octava del club blanco, el 24 de mayo de 2000 en París ante el Valencia.
Desde entonces, una carrera meteórica que le llevó a conquistar otras dos Champions League y un total de cinco Ligas, además de ser nombrado durante cinco temporadas consecutivas como mejor portero del mundo entre 2008 y 2012 por la IFFHS. Unos logros que le colocaron en el primer escaparate del fútbol mundial y no hacían presagiar el declive de sus últimas campañas.
Una etapa de debates y constantes polémicas en torno a la portería del Real Madrid, que tuvieron a Iker Casillas siempre como eje principal
CON MOURINHO CAMBIÓ TODO
A pesar de conquistar varios títulos durante sus dos primeras temporadas junto a Mourinho, la suplencia de Iker en diciembre de 2012 inició un calvario para el guardameta, cuyo rendimiento sobre el césped empezaba a mostrar un evidente desgaste. Ese fue el inicio del fin para Casillas, que ya no volvió a la portería del Real Madrid de forma habitual hasta este curso que ha finalizado con Ancelotti.
Una etapa de debates y constantes polémicas en torno a la portería del Real Madrid, que tuvieron a Iker Casillas siempre como eje principal. El momento culmen en esta situación, que probablemente ha desencadenado en la decisión final del cancerbero, tuvo lugar en el partido ante el Valencia de la campaña pasada, cuando el Santiago Bernabéu de forma generalizada expresó su descontento con el portero y éste reaccionó airadamente.
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SU FUTURO
Largas páginas en la historia del Real Madrid que Iker Casillas dejará atrás para abrir paso a su nueva etapa en el Oporto, donde asumirá un papel protagonista en un club más acostumbrado a formar grandes estrellas del fútbol europeo que a acoger sus últimos años en la élite. Lopetegui, técnico del conjunto luso, ha sido el elemento decisivo para apostar por el de Móstoles.
El entrenador vasco ha cimentado un equipo con un toque muy español en el que Iker Casillas quiere volver a recuperar las sensaciones perdidas en los últimos tiempos, y que tan solo ha disfrutado en la Selección. Vicente Del Bosque, que siempre le ha mostrado públicamente su defensa, se ha convertido en su gran apoyo deportivo. “Mi admiración por Iker es grande, está entre los mejores”, afirmó con rotundidad el seleccionador recientemente.
Ahora será Helton, Ricardo Nunes y Andrés Fernández quienes competirán por un sitio en el once con el ya ex madridista. Casillas partirá como principal candidato a convertirse en el titular indiscutible, lo que le permitiría seguir aumentando su histórico registro de 150 participaciones en Champions League, solo una por detrás del hasta ahora barcelonista Xavi.
Un nuevo reto para uno de los futbolistas más laureados de la historia del fútbol, que tendrá que reinventarse en una etapa llena de incertidumbres lejos del equipo donde dio sus primeras patadas a un balón. Un nuevo reto también para el Real Madrid, que despide a uno de sus grandes para hacerle un hueco al lado de las leyendas que colocaron su escudo en lo más alto.
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