La mujer de Fran Rivera, Lourdes Montes, espera en la etapa final del embarazo la evolución del torero

Fran Rivera no ha comenzado la temporada con buen pie. Si hace apenas dos días sufría una cogida leve mientras toreaba en Marbella frente a la atenta mirada de su mujer y de su hija Tana, ahora, el diestro se ha enfrentado a una cogida mucho más fuerte.

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Este lunes 10 de agosto, Rivera resultaba herido por el cuarto toro del festejo que se celebra este lunes en Huesca. Rivera recibió una cornada en el bajo vientre, de la que fue operado poco después en la enfermería de la plaza. El toro "Traidor", de la ganadería de Albarreal, enganchó a Rivera por la zona abdominal, dejándolo varios segundos colgado del pitón.

En estos momentos el torero continúa en estado "muy grave" tras haber sido intervenido en la enfermería de la plaza de toros. Rivera salió del quirófano pasadas las diez de la noche tras dos horas y media de operación. Su apoderado fue el encargado de confirmar que el asta de toro no ha herido ningún órgano vital pero que, aún así, su estado reviste mucha gravedad.

Al terminar la operación, el médico que le atendió aseguraba en su cuenta de Facebook que "nosotros sólo le hemos cuidado y será Dios quién le cure. Lo mejor ahora es la cautela, observación y todas nuestras oraciones por el torero".

Ahora, tanto Lourdes, que pronto dará a luz a Carmen la primera hija en común de la pareja, como Tana, primogénita de Rivera fruto de su anterior matrimonio con Cayetana Martínez de Irujo, se mantienen prudentes y expectantes a la espera de conocer la evolución del diestro.

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