Berenberg y Citi pasan la tijera por Grifols. En el caso de la primera, la alemana baja ligeramente el precio objetivo de las acciones de clase A y de clase B de Grifols. En el primer caso, lo sitúa en 34 euros desde los 35 euros previos y en el segundo caso lo fija en 25,45 euros desde los 26,20 euros. Pese a esta ligera bajada, aún ve potencial en la compañía (sus acciones de clase A cotizan a 28 euros) y sigue aconsejando 'comprar'.
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"La fuerte inversión de los últimos años ha dejado a Grifols bien posicionado para superar el mercado de los hemoderivados, mejorar la dinámica de ingresos por litro y mantener controlado el crecimiento de los costes", explican desde la firma alemana.
En conjunto, Berenberg considera que esto impulsará las CAGR estimadas para 2021-2025 del 7% en ingresos, el 10% en EBITDA y el 12% en beneficio por acción ajustado. "No creemos que ninguna de las dos acciones refleje el potencial de crecimiento del negocio y tenemos calificaciones de 'compra' en ambas", señalan.
Respecto a Citi, el banco de inversión estadounidense recorta su recomendación de la biofarmacéutica desde 'mantener' a 'vender' tras "un duro golpe de realidad". Además, revisa también a la baja su precio objetivo, al que sitúa en los 25 euros por acción.
Grifols es noticia esta semana porque ha reconocido un impacto negativo de 200 millones de euros en su cuenta de resultados de 2020 por el Covid-19. La compañía ha implementado un plan de contención de gastos operativos no estructurales para mitigar este impacto, que se estima que tenga un efecto positivo de 100 millones de euros en la cuenta de pérdidas y ganancias de 2020.
