El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha publicado este miércoles su informe fiscal sobre España, en el que da sus proyecciones sobre el déficit y la deuda, y lo cierto es que no son nada halagüeñas. En concreto, el organismo espera que estos dos parámetros sigan siendo elevados los próximos años, de forma que sitúa el déficit en el 3,9% y la deuda pública por encima del 114% del PIB al menos hasta 2027.
La institución internacional es poco optimista sobre la posición fiscal de España. Cree que el país reducirá este año su déficit al 5,3% desde el 7% de 2021, y seguirá por la misma senda en 2023 hasta el 4,3%. Sin embargo, el saldo presupuestario negativo se estancará en el 3,9% durante el resto de los años del pronóstico.
Y algo similar ocurrirá con la deuda. El FMI augura que cerrará 2022 en el 116,4% del PIB, y bajará hasta el 115,9% en 2023 y el 114,7% un año después. Pero a partir de ahí se estancará, de forma que se mantendrá en el 114,5% durante todo el horizonte de las proyecciones, es decir, hasta 2027. Estos niveles seguirán, por tanto, muy por encima de los registrados antes de la pandemia de Covid-19.
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Todo esto es reflejo de la incertidumbre que planea sobre las finanzas públicas de los países como consecuencia de la guerra en Ucrania. "Los planes y proyecciones fiscales de medio plazo enfrentan un grado excepcional de incertidumbre dependiendo del desarrollo de la guerra, especialmente en Europa, la inflación y los tipos de interés", indica el FMI en el mencionado informe fiscal.
También destaca que aún se desconocen los efectos secundaros de las sanciones a Rusia y que variarán entre países. "Los déficits están cayendo globalmente pero se espera que se mantengan por encima de los niveles previos a la pandemia", apunta en el documento. Por eso el Fondo es partidario de que el apoyo fiscal de los gobiernos se focalice en los más afectados por esta crisis.
Estas proyecciones del organismo que dirige Kristalina Georgieva se conocen después de la rebaja en la previsión del crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) de España que hizo este martes el Fondo, que ahora espera que la economía solo avance un 4,8% este año, desde el anterior 5,8%. Asimismo, también recortó desde el 3,8% hasta el 3,3% su pronóstico sobre el PIB para 2023. Estima que crecerá aún un 3,1% en 2024, moderando el ritmo de expansión al 1,9% en 2025, al 1,7% en 2026 y al 1,6% en 2027.
Además, anticipó que la inflación en España se situará en el 5,3% este año, aunque se ralentizará al 1,3% en 2023. Una brusca corrección a la baja que no seguirá en los siguientes años. Y es que estima que habrá un repunte de una décima un año después, hasta el 1,4%, subiendo al 1,6% en 2025 y hasta el 1,7% en promedio cada uno de los dos años siguientes.
REDUCCIÓN DEL DESEMPLEO
El FMI cree que la recuperación de la actividad en España permitirá una reducción paulatina del desempleo, de forma que cerrará este año en el 13,4%, por debajo del 14,1% anterior a la pandemia. Tras eso, el organismo confía en que la tasa de paro siga moderándose hasta el 13% el próximo año y el 12,7% en 2024. La reducción seguirá en 2025, cuando estima que el paro se situará en el 12,6%, y seguirá bajando hasta el 12,5% en los dos últimos ejercicios de su horizonte de previsiones.
Si se cumplen las proyecciones del FMI, el paro logrará este año, por primera vez desde 2008, superar el umbral de los 20 millones de ocupados, con una previsión de 20,263 millones para 2022, frente a los 19,779 de 2019, que el próximo año aumentarán hasta los 20,448 millones.
