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El Comité de Política Monetaria del Banco de Inglaterra (BoE) ha decidido mantener los tipos de interés en el 0,75%. La autoridad monetaria de Reino Unido subió los tipos hasta este nivel el pasado mes de agosto, tras elevarlos en 25 puntos básicos.

En su reunión de este jueves, la autoridad monetaria de Reino Unido ha tomado también la decisión de votar de forma unánime a favor de mantener las compras de bonos corporativos en 10.000 millones de libras y del Estado en 435.000 millones de libras.

"La economía global continúa creciendo por encima de las tasas previstas, apoyando el comercio en Reino Unido", señala la autoridad monetaria en su comunicado, en el que añade que el crecimiento se ha "suavizado" y ha dejado de ser uniforme entre los diferentes países al tiempo que los riesgos a la baja "han aumentado".

En opinión del BoE, "las condiciones financieras mundiales se han estrechado, especialmente en los mercados emergentes, y la actividad se ha desacelerado en la zona euro". "Las restricciones comerciales han aumentado y existe un riesgo de escalada", añade.

Las proyecciones económicas del Banco de Inglaterra dependerán "significativamente" de cómo se ejecute el acuerdo sobre el brexit con la Unión Europea, especialmente en relación con los nuevos acuerdos comerciales, la "suavidad" de la transición hacia ellos y la respuesta de los hogares, las empresas y los mercados financieros, apunta el BoE.

"Las implicaciones para un camino apropiado de la política monetaria dependerán del balance de los efectos sobre la demanda, la oferta y el tipo de cambio", añade la autoridad monetaria, cuyo Comité de Política Monetaria del Banco de Inglaterra cree que la respuesta de la política monetaria al brexit, "sea cual sea la forma que tome, no será automática y podrá tomar cualquier dirección".

El comité también cree que, si la economía continúa desarrollándose en línea con las proyecciones de su informe de inflación del pasado mes de noviembre, "un ajuste continuo de la política monetaria durante el período del pronóstico sería apropiado para devolver la inflación de manera sostenible al objetivo del 2% en un horizonte convencional". "Es probable que cualquier aumento futuro en los tipos de interés sea a un ritmo gradual y en una medida limitada", apunta el órgano.

En la rueda de prensa posterior al anuncio, el gobernador Carney insinuó a los periodistas que si se alcanza un acuerdo para el brexit, podría haber nuevos aumentos en los tipos de interés, según destaca la CNBC.

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