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La reconocida calidad de las producciones de Netflix tiene un precio cada vez más alto y la compañía estadounidense está sufriendo para lograr los ingresos que hagan rentable una inversión de ese tamaño. El servicio de ‘streaming’ dirigido por Reed Hastings ha fijado su mirada en el inmenso mercado asiático como la fórmula para lograr la ansiada rentabilidad.
La estrategia de Netflix para tratar de asaltar Asia se basa en dos pilares: las producciones realizadas en el propio continente y un inédita política de precios reducidos. Los paquetes de Netflix nunca han sido rebajados hasta la fecha en el resto de mercados donde opera, pero los millones de usuarios potenciales de países como India o China bien valen un replanteamiento en este aspecto.
UN MERCADO POR CONQUISTAR
Netflix cuenta con 137 millones de suscriptores a nivel global, pero la inmensa mayoría se localizan en Europa y América. Hasta la fecha, la penetración de Netflix en el mercado asiático se ha limitado a las clases medias angloparlantes en países como India. Una mínima porción del mercado del continente que, sin embargo, se ha inclinado hacia alternativas más baratas dada la baja renta de la mayoría de la población en la región.
“No van a lograr 100 millones de suscriptores en India con la actual estrategia”, declaró a Bloomberg Vivek Couto, director ejecutivo de la consultora Media Partners Asia. Los principales competidores de Netflix en Asia, como PCCW, Amazon Prime Video o Hotstar ofrecen sus servicios por precios que rondan los 3 y 5 euros al mes, frente a la tarifa mínima de 8 euros que la empresa estadounidense cobra a sus clientes en cualquiera de sus mercados.
Hastings, sin embargo, ya dejó claro que la empresa no se plantea cambiar las tarifas de sus paquetes - Básico, Estándar y Premium - sino experimentar con uno nuevo, con prestaciones distintas, como por ejemplo estar solo disponible para móviles, y un precio más reducido.
EN BUSCA DE LA RENTABILIDAD
La semana pasada presentó 17 nuevas producciones grabadas en asia con actores y tramas locales en un evento con toda la pompa ante un centenar de periodistas e ‘influencers’ de redes sociales del continente en Singapur.
Precisamente este pequeño país del sudeste asiático será donde Netflix ubique su nueva sede en Asia desde donde producirá 100 películas y proyectos televisivos en India, Corea, Japón, Tailandia y Taiwan.
Hasta el momento, los inversores han seguido apostando por Netflix confiando en su viabilidad en el futuro, aunque ha venido perdiendo fuelle en el Nasdaq desde sus máximos históricos logrados en julio de este año.
Algunos gurús como Aswath Damodaran ya han alertado sobre la inviabilidad del modelo de Amazon cuando tenga que afrontar el final del crecimiento en el número de suscriptores en sus mercados actuales. Del éxito de su penetración en Asia dependerá que la plataforma de 'streaming' más exitosa del mundo logre encarrilar un proyecto que, hasta la fecha, no ha logrado hacer rentable.
