- En los últimos días ha arremetido duramente contra Gonzalo Curiel, el juez federal que se ocupa del supuesto fraude, perpetrado por Trump, con la falsa universidad que llevaba su nombre
- Trump domina el arte de la venganza y está dispuesto a utilizar su cargo para ello
Trump ha adoptado un tono más presidencial y no ha rebajado su agresividad una vez asegurada la nominación republicana para las elecciones presidenciales.
Tal y como informa El País, el magnate ha asegurado en los últimos días que, de llegar a la Casa Blanca, ajustará cuentas con empresas y jueces que se oponen a sus designios. Además, la candidata demócrata, Hillary Clinton ha sido principal objeto de sus ataques esta semana.
El candidato republicano no ha rebajado su agresividad y mantiene, entre otras cosas, un tono racista y amenazante
Además, ha arremetido contra Gonzalo Curiel, el juez federal que se ocupa del supuesto fraude, perpetrado por Trump, con la falsa universidad que llevaba su nombre. Trump sostiene que sus propias posiciones contra los inmigrantes sin papeles y su promesa de sellar la frontera con México impiden al juez Curiel juzgar con imparcialidad el caso de la llamada Universidad Trump.
Los ataques del candidato al juez incomodan a algunos líderes republicanos. Ejemplo de ello es que el presidente de la Cámara de Representantes, Paul Ryan, dijo: “El comentario sobre el juez el otro día está fuera de lugar, en mi opinión. Es un razonamiento que no comparto”.
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MEZCLA DE INTERESES PÚBLICOS Y PRIVADOS
Y es que Trump domina el arte de la venganza y está dispuesto a utilizar su cargo para ello. De esta manera amenaza a Curiel: “Volveremos en noviembre. ¿No sería increíble si soy presidente y vuelvo y presento un caso civil?”
Trump domina el arte de la venganza y está dispuesto a utilizar su cargo para ello
Sin embargo, el asalto a la división de poderes y la retórica racista no es la única innovación de Trump en esta campaña, también la mezcla de intereses privados y públicos es descarada. Entre otras cosas, Trump dice que, cuando sea presidente, quiere reabrir la Universidad Trump y a finales de junio viajará a Escocia para reinaugurar de un campo de golf suyo.
Asimismo, estas amenazas también han coincidido con insultos a los periodistas y con altercados violentos en los mítines.
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