La ruptura interna del partido griego Syriza que ganó los comicios generales del país el pasado 25 de enero, se hace cada vez mayor y da signos de ruptura. El motivo sería el hecho de llegar a un acuerdo con los acreedores europeos y permitir determinadas concesiones, pisando las famosas 'líneas rojas' que el ejecutivo no estaba dispuesto a tolerar.
De esta manera, la ruptura se puede observar en datos. Según ha informado El País, el 44% de los cuadros del partido propuso la ruptura en la negociación con los socios y el impago de la deuda. Además, los mismos pronían la nacionalización de la banca y la imposición de tasa a las rentas altas, lo que llevaría, con todo este perfil, a una salida de la moneda única sin precedentes.
La propuesta antieuropeísta fue rechazada únicamente por 95 votos frente a 75, dejando entrever lo igualadas que están ambas ideologías dentro del partido del gobierno griego.
Así, el medio asegura que no se trata simplemente de un problema interno, sino que puede afectar a la gobernabilidad ya que, si el Parlamento griego no aprueba el acuerdo de algunos diputados. el país puede estar ante una nueva convocatoria de elecciones.
Los bloques del partido están muy igualados
Las diferencias entre el ala más permisiva del partido y la más radical han ido aumentando desde el mes de febrero, en plena negociación de la prórroga del segundo rescate. La parte más radical y favorable a la salida del euro cuenta con personalidades como los europarlamentarios Kostas Lapavitsas o Stathis Kuvelakis.
Hoy por hoy el país helénico se encuentra parado en la forma de llegar a una negociación de pago. Aunque el pasado miércoles se filtrara un posible acuerdo con los acreedores y eso hiciera disparar la bolsa del país, no se materializó en nada y, según El País, algunos lo interpretan como una respuesta de Alexis Tsipras para evitar que los depósitos salgan del país.
Respecto a la fecha límite de devolución de la primera parte de la deuda, ya no será el día 5 de junio, sino que se ha retrasado hasta el día 30 del mes, cuando expira la prórroga del rescate, según ha comentado el ministro de Finanzas, Yanis Varoufakis.
“Cualquier cosa es posible, un acuerdo o un impasse aún mayor. Personalmente, en estas circunstancias, defiendo la ruptura con los acreedores, aunque eso suponga la salida del euro”, ha dicho Zabitsanu, militante en la Plataforma de Lafazanis.
Sin embargo, siempre hay voces que estiman que por muchas diferencias, el partido no va a romperse, El periodista Nikos Konstandaras ha declarado: “Syriza no se va a romper; les gusta demasiado el poder y ahora que lo han logrado no lo van a soltar, sea cual fuere el acuerdo que se firme, si se firma”.
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