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Jornada negra en el parqué neoyorquino. Wall Street se desploma este jueves (Dow Jones: -3,12%; S&P 500: -3,56%; Nasdaq: -4,99%) después del rally alcista que registraron los índices neoyorquinos tras la reunión monetaria de la Reserva Federal (Fed). El rendimiento del bono americano a 10 años se ha disparado por encima del 3% y ha perjudicado sobre todo al sector tecnológico: el Nasdaq se ha hundido casi un 5% y el S&P 500 ha bajado cerca de un 4%.

"Si se sube un 3% y al día siguiente se cede medio punto porcentual, es algo bastante normal. Pero tener el tipo de día que tuvimos ayer y luego ver cómo se invierte el 100% en medio día es realmente extraordinario", ha señalado Randy Frederick, director gerente de comercio y derivados en el Centro Schwab de Investigación Financiera, en declaraciones a 'CNBC'.

El banco central de Estados Unidos cumplió fielmente el guion que había anticipado al mercado en las últimas semanas. Elevó los tipos de interés 50 puntos básicos (la primera subida de este calibre en 22 años), anticipó más subidas similares en las dos próximas reuniones y confirmó que reducirá su balance a partir de junio, primero en 47.500 millones de dólares durante tres meses y en 95.000 millones a partir de septiembre.

Los expertos de Rabobank señalan que las medidas anunciadas "ya habían sido descontadas", y destacan sobre todo que Jerome Powell, presidente del organismo monetario, descartó una subida de 75 puntos básicos en próximos encuentros. "No es algo que el Comité esté considerando activamente", sentenció.

"El hecho de que una subida de 75 puntos básicos (aplicada por última vez en 1994) esté fuera de la mesa fue suficiente para aplastar al dólar, provocar un fuerte rally en Wall Street y desplomar los rendimientos de los bonos. Que la Fed no vaya a ser tan dura como algunos habían temido fue suficiente" para el mercado.

Sin embargo, estos expertos añaden que la política monetaria de la Fed aumenta de manera notable el riesgo de recesión, lo que explica el miedo del mercado y el desplome de los índices.

"En esta etapa, desacelerar severamente la economía o empujarla a la recesión es probablemente la única forma de terminar con la espiral de precios y salarios que se ha producido en EEUU".

En su opinión, "el principal error de la Fed fue ignorar el aumento de la inflación que se produjo el año pasado", lo que sumado al impacto inesperado de la guerra en Ucrania, le obligará a situar su política monetaria en territorio "restrictivo", lo que finalmente provocará una recesión en EEUU "en la segunda mitad de 2023".

Por tanto, habrá que ver cuál es el rumbo de las bolsas en las próximas semanas, para ver hasta qué punto descuentan o no el riesgo creciente de una recesión en EEUU. Sobre todo porque persisten los dos principales problemas para el mercado, sobre los que la Fed no tiene poder para influir. De momento, la reacción está siendo muy negativa y las ganancias de ayer han sido un espejismo.

DEBILIDAD EN CHINA Y GUERRA EN UCRANIA

La guerra en Ucrania sigue su curso y continúa elevando los precios de las materias primas, debido a que la Unión Europea ya ha anticipado su plan para dejar de consumir petróleo ruso en los próximos meses.

Pese a que algunos analistas consideran que el conflicto terminará pronto, porque la capacidad militar rusa se encuentra ya muy desgastada, la incertidumbre sobre los suministros de petróleo y gas en Europa continuará elevada durante los próximos meses.

Por otra parte, tal y como han mostrado los débiles datos publicados en China sobre la evolución del sector servicios, la política de tolerancia cero contra el Covid 19 aplicada por Xi Jinping seguirá tensionando las cadenas globales de suministro y añadiendo presión a la inflación en las economías occidentales. Además, como han mostrado los últimos datos publicados, está provocando una gran debilidad económica en el gigante asiático.

A nivel macroeconómico, las peticiones semanales de desempleo han ascendido hasta las 200.000 en la semana del 30 de abril, desde las 181.000 registradas la semana anterior y por encima de las 182.000 previstas.

EMPRESAS Y OTROS MERCADOS

En otro orden de cosas, Elon Musk podría hacer que Twitter "empeore". Eso es lo que cree el cofundador de Microsoft, Bill Gates, después de que el CEO de Tesla se comprometiera a comprar la empresa de redes sociales por 44.000 millones de dólares.

Además, se ha conocido que Musk ha conseguido otros 7.000 millones de dólares por parte de varios inversores para financiar la operación, y que será el CEO temporal de la compañía.

El barril de crudo West Texas ha repuntado un 0,44% ($108,29) y el barril Brent ha subido un 0,71% ($110,92), mientras el euro se ha depreciado un 0,70% ($1,0546). Además, la onza de oro ha avanzado un 0,55% ($1.879). Por último, el bitcoin se ha desplomado un 9,23% ($36.143) y ha registrado su peor jornada desde enero; y la rentabilidad del bono americano a 10 años ha repuntado hasta el 3,03%, su nivel más alto desde 2018.

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