ep el primer ministro italiano giuseppe conte y el ministro de salud roberto speranza
El primer ministro italiano, Giuseppe Conte, y el ministro de Salud, Roberto SperanzaFilippo Attili/Italian Governmen / DPA

Italia busca en el beneplácito de Bruselas a incrementar el déficit para este año la guinda a su ‘pastel’ de medidas para paliar los efectos del coronavirus en la economía del país transalpino. El Gobierno de Giuseppe Conte contempla pasar del 2,2% actual a un nuevo 2,5% del PIB, evitando sobrepasar el techo del 3% impuesto por Bruselas. Su Ejecutivo necesita elevar el nivel de endeudamiento para poner en marcha un plan de asistencia anunciado entre el viernes y el lunes que se completa con un paquete de medidas de ayuda por valor de 4.500 millones de euros, el equivalente al 0,3% de su PIB.

Para poder elevar el nivel de endeudamiento del país, el Ejecutivo necesita la autorización del Parlamento y el beneplácito de la UE. Una petición que el ministro de Economía, Roberto Gualtieri, trasladó a sus homólogos del la Unión Europea (UE) este martes, junto a quienes acordó medida fiscales extraordinarias aún sin concretar, según el comunicado del G7 emitido al cabo de su reunión de ayer.

Italia ha anunciado un paquete de asistencia, mediante un decreto ley aprobado por su consejo de ministros el pasado viernes que contempla, además de una inyección de 3.600 millones de euros prometida el lunes, otras medidas por valor de 900 millones. En total, el Gobierno de Conte prevé insuflar la tercera economía de la Eurozona con 4.500 millones de euros.

Se ha aprobado la suspensión de pagos durante dos meses de las facturas de luz, gas, agua y basuras para los municipios sometidos a aislamiento obligatorio, recoge ‘El País’. También prevé la congelación durante un año del pago de los préstamos concedidos a los negocios de la zona afectada por la Agencia Nacional para el Desarrollo Empresarial, que depende del Ministerio de Economía. Y un subsidio especial de 50º0 euros al mes durante un máximo de tres meses, para los trabajadores autónomos que hayan tenido que suspender su actividad.

Para los próximos meses, el Banco de Italia ha calculado que el PIB del país podría contraerse más de un 0,2% como consecuencia de la emergencia sanitaria. Los contagios en Italia, donde el foco de la enfermedad se concentra en Lombardía y Véneto, ascienden a más de 1.700.

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