Tubacex registró en los nueve primeros meses del año un beneficio neto atribuible de 12,4 millones de euros, frente a los 1,1 millones que logró en el mismo periodo del año pasado, según ha informado la compañía este lunes.
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Hasta septiembre, ha conseguido aumentar sus ventas un 40,3% hasta los 519,9 millones de euros, mientras que su EBITDA ha alcanzado los 55,3 millones de euros, un 128,5% superior al mismo periodo del año anterior. El capital circulante fue de 231 millones de euros, lo que supone un aumento de 38 millones con respecto al cierre de 2017.
En cuanto al nivel de endeudamiento, se mantiene en niveles similares al año pasado, a pesar del fuerte incremento de las ventas y del capital circulante consecuencia del aumento de peso de los productos de alto valor añadido. El ratio de deuda financiera neta sobre EBITDA continúa descendiendo de manera significativa y se sitúa en 4,5 veces frente al 9,8 veces de cierre de 2017.
Según Jesús Esmorís, consejero delegado de Tubacex, "pese a la inestabilidad macroeconómica actual, se observa un relanzamiento progresivo en nuestra actividad, por eso, las perspectivas a medio plazo en el sector son muy positivas, con una gran cantidad de proyectos de adjudicación que configuran un 2019 en recuperación y definen al menos los años 2020 y 2021 como de fuerte expansión en el sector".
Añade que "prueba del éxito de esta estrategia es la reciente firma de un acuerdo de intenciones con el Gobierno de Egipto para el desarrollo de energía nuclear".
La compañía recalca que la sólida estructura financiera del grupo con una posición de caja alta, superior a 100 millones de euros, lo que permite hacer frente a los vencimientos de los próximos tres años incluso en el peor de los escenarios. "Nuestro posicionamiento permite anticipar la participación activa de Tubacex como un jugador de primer nivel en los proyectos más significativos a desarrollar a nivel mundial generación eléctrica convencional y nuclear en los próximos años", afirma Esmorís.
Por mercados, el sector de extracción y producción de petróleo y gas representa el 52% de las ventas del grupo. La incertidumbre macroeconómica y el auge de las medidas proteccionistas en algunos países han ralentizado en los últimos meses la toma de decisiones finales de inversión en este segmento. Sin embargo, los actuales precios del petróleo y gas unidos al crecimiento de su consumo a nivel mundial hacen que exista un pipeline de adjudicación de proyectos extraordinariamente alto para los próximos años, explica la compañía.