• La familia Pont controla el 89% de las acciones de Borges, dedicado a la producción de nueces, almendras, aceites y frutos secos
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Familia Pont junto a Artur Mas en la inauguración de la primera plantación de pistachos de regadío de Cataluña (2015)Borges Internacional
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Borges Agricultural & Industrial Nuts (BAIN), la empresa agrícola de la familia Pont, lleva algo más de una semana dando que hablar en la bolsa española. Su cotización se ha triplicado al igual que su capitalización bursátil, que ha pasado de valer apenas 55 a 180 millones al cierre de este viernes.

En tan sólo diez sesiones, las acciones de la empresa agrícola se han revalorizado un 227% pero sin apenas negociación, ya que el free float del grupo -acciones que cotizan libremente y no están en manos de ningún accionista institucional- es muy bajo.

La familia Pont controla el 89% de las acciones de Borges, dedicado a la producción de nueces, almendras, aceites y frutos secos. Ese salto de valoración del 200% se ha gestado con apenas 2 millones de euros de volumen efectivo de negociación. Sólo cambiaron de manos 42.000 títulos de los 3,3 millones en que se divide su capital social. Los Pont no han vendido una sola de sus acciones, aunque Borges prevé realizar una ampliación de hasta el 25% de su capital en los próximos meses.

Y es que Borges acaba de salir de las tinieblas bursátiles de los corros -las reliquias de las antiguas bolsas en las que se negociaban acciones a viva voz entre los brókers al pie de parqué-, para saltar al Mercado Continuo, donde se negocian los grandes valores de la bolsa española. No obstante, las acciones de Bain todavía cotizan en modo fixing -por el que se cruzan dos veces al día las órdenes de compra y venta-. Comenzaron a cotizar en el Mercado Continuo el 24 de julio, después de moverse en los citados ‘corros’ desde 1988. Borges es una a empresa era centenaria, ya que fue fundada en 1896.

La familia Pont controla el 89% de las acciones de Borges, dedicado a la producción de nueces, almendras, aceites y frutos secos.

EL CLAN PONT

Borges pertenece a la familia Pont desde 1896. Antonio Pont y Dolores Creus montaron un pequeño negocio familiar de compraventa de aceitunas y almendras en la zona de Tárrega (Lleida, España). Y, 121 años después, sus herederos gestionan una compañía que distribuye en 54 países.

Ahora en el consejo de administración de Borges se sientan miembros de la tercera generación de la familia Pont: los hermanos Antoni Pont Amenós, Ramón Pont Amenós (también directivo del FC Barcelona) y Josep Pont Amenós, y su primo, Antonio Pont Grau. Cada uno de ellos es propietario de parte del capital del grupo.

Una generación que ha decidido internacionalizar el negocio de sus abuelos. En 1971 con la importación de frutos secos procedentes de California, ha dado buenos resultados. En el año 1985, nace Borges of California, una compañía que focaliza su negocio en la producción de nueces y almendras. Su filial Borges USA está presente en las principales cadenas de distribución bajo las marcas Star y Cara Mia. Entre sus clientes se encuentran las cadenas de supermercados Wal-Mart, Safeway o Ahold.

UN NEGOCIO DE NUECES, ALMENDRAS Y PISTACHOS

Para dar más luz a su nueva presencia bursátil, la compañía de los Pont ha publicado los resultados de Borges correspondientes a su primer año fiscal. Según las cifras enviadas a la CNMV, el grupo catalán cerró el año fiscal -hasta 31 de mayo de 2017- con un beneficio neto de 3,5 millones de euros, un 150% más que el año anterior. Sus ingresos se incrementaron un 18,5%, hasta los 197 millones, mientras que su ebitda (resultado bruto de explotación) se elevó un 31%, hasta 6,6 millones.

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