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El principal delator y uno de los acusados en la investigación por corrupción en la petrolera estatal brasileña Petrobras, el exdirector de Abastecimiento, Paulo Roberto Costa, declaró a la Policía que recibió un soborno de 31,5 millones de dólares por parte de la constructora Odebrecht.

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Según el ha indicado el propio Costa, él recibía "cada dos o tres meses" los sobornos como parte de la "política de buenas relaciones" con la empresa. Según ha destacado el exdirectivo, entre los años 2008 y 2013 llegó a sumar 31,5 millones de dólares y admitió que en 2014 pudo recibir más dinero en cuentas de Suiza, a pesar de haber dejado su cargo en Petrobras.

Según indica el diario OEstado de Sao Paulo, Costa señaló como su contacto en la constructora a Rogerio Araújo, director de la subsidiaria Odebrecht Plantas Industriais. El caso se refiere al pago de sobornos multimillonarios, durante la última década, a políticos y ejecutivos de Petrobras con fondos de la petrolera y de empresas que tenían contratos con la estatal.

Tras conocerse las declaraciones, la constructora Odebrecht negó las "afirmaciones calumniosas" de Costa a través de un comunicado negando "en especial, haber hecho cualquier pago o consignación en una supuesta cuenta de cualquier político, ejecutivo o exejecutivo de la estatal".

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Según las autoridades que investigan el caso, los funcionarios de alto rango de la petrolera estatal cobraban comisiones por la concesión de los multimillonarios contratos vinculados a Petrobras.

Además, este dinero era canalizado a campañas electorales del Partido de los Trabajadores, que encabeza la presidenta Dilma Rouseff, así como a otras fuerzas y formaciones políticas.

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