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Ildefonso Sánchez Barcoj EUROPA PRESS - Archivo

La defensa del exconsejero de Caja Madrid Ildefonso Sánchez-Barcoj ha renunciado a efectuar preguntas a su representado al considerar que no sabe de qué se le acusa en la causa penal que investiga las responsabilidades por la salida a bolsa de Bankia. El exconsejero se ha limitado a ponerse a disposición de la Justicia, mientras que su abogado ha decidido renunciar a preguntarle por su papel en Caja Madrid, por lo que su declaración ha durado escasos minutos.

Sánchez-Barcoj ha manifestado ante el tribunal del caso Bankia que el consejo de administración de Caja Madrid, al que él perteneció, cumplió "a carta cabal" las instrucciones de las autoridades. Esta frase ha sido la única defensa que ha emitido el exconsejero ante el tribunal.

Durante su pequeño discurso inicial, previo a aclarar si quería contestar a la Fiscalía, a la Abogacía del Estado y a las acusaciones o solamente a su abogado, Sánchez-Barcoj ha recordado al tribunal, que le conoce de otras causas penales, como la relativa a las tarjetas black, que su disposición "siempre ha sido muy abierta".

Por ello, ha explicado que si en algún momento del transcurso de la causa su situación procesal cambia para bien o para mal, seguirá teniendo una buena disposición con el tribunal. "Ya me conocen, soy elocuente y estaría a su disposición", ha apuntado.

Todo a pesar de que el también ex director financiero de Bankia presentó en enero un escrito de recusación contra los magistrados que conforman el tribunal, después de que decidieran mantenerle en el banquillo de los acusados pese a los intentos de su abogado de que no fuera así durante las cuestiones previas, según publicó Cadena Ser. El tribunal consideró legitima su acusación por parte de las acusaciones populares y particulares, que piden hasta 12 años de cárcel para él, al creer que fue "cooperador necesario" para la comisión de los delitos por su papel como director financiero.

Este miércoles, el exconsejero de Caja Madrid ha recordado que ni la Fiscalía ni la Abogacía del Estado le acusan, por lo que solamente tienen algo contra él las acusaciones particulares y populares, a las que ha desligitimado. "Me resulta imposible defenderme porque no sé de qué hechos me tengo que defender", ha señalado Sánchez-Barcoj, para después ponerse a disposición del tribunal y de su abogado para contestar a las preguntas que quisieran efectuarle.

Dicho esto, el tribunal ha dado paso a su abogado, que se ha limitado a señalar que no iba a efectuar ninguna pregunta, dado que, al igual que su representado, no sabía de qué tenía que defenderle. La presidenta del tribunal, Ángela Murillo, ha permitido entonces a Sánchez-Barcoj volver a su sitio en la sala.

Sánchez-Barcoj fue el exdirectivo de Bankia que más dinero gastó con su tarjeta black. Concretamente, la utilizó para abonar 484.100 euros. Sin embargo, el exconsejero no está en la cárcel, dado que devolvió el dinero gastado para reducir su condena, que finalmente fue de un año menos un día de prisión y seis meses menos un día de multa.

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