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Acerinox ha presentado este jueves sus resultados de 2018, periodo en el que ganó 237 millones de euros, un 1,3% más que en 2017 (234 millones). Se trata, tal y como presume la multinacional española del acero, del mejor dato cosechado en los últimos diez años. Pese a ello, los títulos de la compañía se han dejado un 3,04% en bolsa.
La siderúrgica facturó el año pasado un total de 5.011 millones de euros, lo que representa un 8,3% más que los 4.627 millones ingresados en 2017. Según ha explicado Acerinox en la notificación que ha remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), fue también la más alta de la última década gracias al aumento de las ventas en unidades físicas y a los mayores precios de venta.
Por su parte, el Ebitda ascendió a 480 millones de euros después de hacer un ajuste de inventario por importe de 22 millones de euros. Tras este ajuste, la cifra resultante es un 1,8% inferior a la cifra registrada el ejercicio precedente, de 489 millones de euros. "El impacto de la depreciación experimentada por el dólar en comparación con el año anterior ha afectado negativamente al Ebitda en 14 millones de euros", ha remarcado la compañía.
La deuda financiera neta, a 31 de diciembre de 2018, era de 552 millones de euros. Se redujo en 57 millones de euros en comparación con los 609 millones de euros que suponía a fecha de 31 de diciembre de 2017.
La Junta General Ordinaria de Accionistas celebrada el 10 de mayo de 2018 aprobó repartir un dividendo de 0,45 euros/acción en efectivo, cuyo pago se realizó el 5 de julio. Desde el año 2006, y pese a la complejidad del periodo, Acerinox ha retribuido en efectivo ininterrumpidamente a sus accionistas con un importe anual de 0,45 euros por acción, bien a través de dividendo o de dividendo flexible.
Y la remuneración seguirá aumentando, ya que hay que recordar que el Consejo de Administración de Acerinox, celebrado el pasado 19 de diciembre, decidió proponer a la próxima Junta General Ordinaria de Accionistas un aumento del dividendo del 11%, pasando del 0,45 a 0,50 euros por acción. Asimismo, propondrá reducir el número de acciones para compensar las emitidas en los cuatro años (2013-2016) en que el dividendo se abonó mediante dividendo flexible o scrip dividend. Para ello aprobó también un Primer Programa de Recompra de Acciones para su posterior amortización.
En concreto, el número de acciones a comprar en este Primer Programa será de hasta el 2% del capital de la Sociedad y la compañía destinará a este fin hasta 66 millones de euros.
