Las expectativas sobre la reunión China-EEUU que tendrá lugar desde este jueves en Washington se han enfriado de un plumazo después de que los medios del gigante asiático hayan publicado que la delegación china se plantea recortar su estancia en la capital estadounidense. El acuerdo parece volver a alejarse.
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China ha suavizado sutilmente las esperanzas de los mercados ante la decimotercera ronda de negociaciones entre ambas potencias, que se iba a celebrar el 10 y 11 de octubre, ya que las diferencias entre las partes en cuestiones fundamentales siguen siendo muy acusadas. Según fuentes citadas por el medio South China Morning Post, la delegación asiática ya está planeando acortar su estancia en Washington en una noche.
En concreto, estas fuentes apuntan que si al final se acorta el viaje, eso eliminaría la posibilidad de que las conversaciones se prolongaran hasta el viernes por la noche, como estaba previsto en un inicio, ya que la delegación china pondría rumbo al aeropuerto el mismo viernes, en vez del sábado, como se esperaba.
"Las posturas políticas antes de las conversaciones de alto nivel entre EEUU y China que comienzan el jueves están aumentando peligrosamente las probabilidades de que no veamos un mini-acuerdo comercial o una reducción importante de los aranceles", dicen los expertos de Oanda, que creen que "las probabilidades de que se cierre algún tipo de acuerdo comercial esta semana parecen haber caído del tirón al 40%".
La reacción de China se produce después de que EEUU haya incluido en su 'lista negra' a otras 28 empresas chinas, entre ellas ocho gigantes tecnológicas, por presuntas violaciones de los derechos humanos de las minorías musulmanas. China ya ha rechazado esas acusaciones y ha instado a la Administración de Donald Trump a que corrija su error y "se mantenga en sintonía" porque, de otra forma, tomarán represalias.
El viceprimer ministro Liu He volverá a encabezar la delegación de China en Washington, según una declaración oficial publicada por el Ministerio de Comercio de China este martes. Esta será la primera reunión entre las partes en suelo estadounidense desde el colapso de las conversaciones comerciales en mayo.
