Oceanwood, desde la quiebra de Lehman Brothers hasta el ataque de 'cortos' en Popular

La última actualización del agregado de posiciones cortas, que publicó ayer la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) con fecha del 14 de abril, se disparó en las dos primeras semanas del mes desde el 10,77% hasta el 12,19%, lo que supone un nuevo récord para la entidad, cuya capitalización está en torno a los 2.600 millones. Es decir, acciones valoradas en más de 310 millones de euros están en realidad apostadas contra el valor.

La Junta General de Accionistas del pasado lunes supuso un nuevo argumento para otra escalada en la presión bajista, después de que Emilio Saracho reconociera que el banco “anda corto de capital” y que el futuro pasa por otra ampliación o por una operación de consolidación. Sólo el hedge fund estadounidense, AQR Capital Management, ha dado un paso atrás y continúa con el repliegue que empezó a principios del año, cuando era el más agresivo con más de un 3% del capital posicionado contra las acciones.

Sin embargo, los últimos datos del regulador muestran que la presión sigue, en términos generales, al alza. El último movimiento recogido por la CNMV es el incremento de la posición corta de Oceanwood Capital Management, que empezó abril en el 0,4% y tiene ya un 0,85% (aunque ha llegado a tocar el 0,9%), lo que supone 22 millones de euros. Así, es ya el más agresivo tras Marshall Wace (2,39%), Samlyn Capital (1,42%) y AQR (1,36%).

Oceanwood es una gestora con sede en Reino Unido y Malta que gestiona más de 2.000 millones de euros. Tiene en su oferta varios ‘hedge funds’, aunque también administra otros productos como fondos de pensiones. Entre sus inversiones está Liberbank, donde es el fondo que mayor participación tiene al controlar un 10,266%, según los registros de la CNMV. Una porción del capital del banco valorada en más de 100 millones de euros.

La firma se fundó en 2006 a partir del grupo de inversión Tudor por un ex de Goldman Sachs, Christopher Gate, dos años antes del hundimiento de Lehman Brothers, en cuyo comité de quiebra participó junto con GLG Partners y Ramius Capital Group en 2009 para las ramificaciones europeas y el dinero que gestionaba en el Viejo Continente el extinto banco de inversión estadounidense.

Su estrategia es multi-activo para “proporcionar a los inversores un rendimiento absoluto atractivo a través del ciclo, aplicando un enfoque fundamental como catalizador de la inversión”, afirma la gestora.