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Tesla Motors ha dado una importante señal de debilidad tras perforar la base (soporte) del canal alcista por el que se viene desplazando el precio desde 2016.
Lo que quiere decir que el ‘momentum’ alcista ha quedado atrás. Ahora bien, en las últimas caídas, al menos tenemos mínimos crecientes. El último de ellos se marcó en los $252,25. O dicho con otras palabras, toda potencial recuperación de los precios en esta compañía pasa porque en todo momento se respete el soporte que presenta en los $252.
Lo ideal, colocarnos a la compra en los niveles de precio más cercanos posibles al soporte que presenta en los $264, que no es otro nivel que el hueco alcista de la sesión del 10 de septiembre. Y stop loss último en precios de cierre por debajo de los $252.
La semana pasada conocimos que el fabricante de vehículos eléctricos, que ha afrontado este verano un sinfín de desafíos, como el fallido intento de salir de Wall Street que quería llevar a cabo su consejero delegado, Elon Musk, se encuentra en este momento "en un infierno logístico", según declaraba el excéntrico fundador de la compañía. "Lo siento, estamos en un infierno logístico que está afectado a la producción, pero estamos haciendo rápidos progresos, debería estar solucionado pronto", afirmaba Musk en Twitter ante la queja de un cliente por un retraso en la entrega de su vehículo.
