• 'La relación de la compañía con el mundo financiero es normal', aseguran
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Es cuestión de horas para que Carbures tenga en sus manos el informe final de PriceWaterHouseCoopers (PwC) después de que el estudio de abogados Uría Méndez entregara su informe jurídico. Puede ser esta misma tarde o el próximo viernes, pero lo cierto es que Carbures enfrentará 2015 con el informe de PwC sobre la mesa.

Se trata de un informe que, desde el interior de la compañía, se encara con razonable tranquilidad. Según fuentes conocedoras de la situación no existe razones para preocuparse, "el que vaya pensando que es un fraude se equivoca completamente, la compañía no tiene ninguna situación de insolvencia financiera y el informe así lo confirmará", aseguran.

"La relación con el mundo financiero es normal, sus necesidades de financiación se cubren con poco y se ha captado 17 millones nuevos, hemos podido cometer errores, pero nunca fraude"

Un informe, en todo caso, que está tardando más de dos meses en salir. Como se recuerda, el pasado 8 de octubre el Consejo de Carbures solicitó la suspensión de sus acciones en el Mercado Alternativo Bursátil (MAB) mientras PwC realizaba una revisión, junto a un grupo legal externo, en este caso Uría Méndez de los estados financieros de la compañía. Desde entonces muchos cambios se han producido al interior de la compañía. Desde el consejero delegado, cuyo cargo lo asumió desde el pasado 20 de octubre José María Tarragó en reemplazo de Rafael Contreras, fundador y primer accionista de la compañía. Y la salida, a inicio del mes de diciembre, del hasta ese entonces consejero y vicepresidente financiero, Juan Juárez.

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EL RUIDO... Y LA FINANCIACIÓN

Así, en medio de este proceso de auditoría que ha provocado incertidumbre en el mercado, las fuentes afirman que Carbures ha sido víctima de la desconfianza que dejó Gowex y, sin embargo, se tratan de situaciones diferentes. "Se han podido cometer errores, pero no hay fraude por eso existe confianza de parte los inversores", aseguran.

Prueba de ello, sería la última operación de financiación por 16,3 millones de préstamos privados, entre ellos los del propio Tarragó. El pasado 23 de diciembre, la compañía informaba, a través de un hecho relevante, que obtuvo cuatro préstamos privados para financiarse, de los cuales uno es de su consejero delegado, José María Tarragó. El total del importe obtenido por la compañía es de 16,3 millones a un tipo de interés del 6% y con un plazo de amortización de tres años.

Las necesidades de financiación de la compañía están cubiertas y esto demuestra que los inversores confían en el grupo. "Se ha logrado captar 17 millones, una cifra que se sitúa por encima de lo que se captó en el MAB en su momento", destacan dichas fuentes que al mismo tiempo reconocen que hay mucho ruido sobre la compañía".

"La relación con el mundo financiero es normal, sus necesidades de financiación se cubren con poco y se ha captado 17 millones nuevos, hemos podido cometer errores, pero nunca fraude", insisten.

Eso sí, son conscientes de que el mercado puede golpear a sus acciones en el momento que empiecen a negociar. "se pueden caer, pero también se van a recuperar", concluyen.

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