El Parlamento ha aceptado la propuesta de Tsipras de convocar un referéndum donde los ciudadanos griegos puedan decidir si quieren, o no, aceptar la propuesta de los acreedores ante el pago de la deuda y el desbloqueo de capital. La decisión pasaría por aceptar o no medidas como la subida de impuestos o la reforma de pensiones a cambio del capital que los acreedores plantearon el día 25 de junio.
Según ha informado Bloomberg, esta consulta de la que se ha hecho el llamamiento a toda prisa por parte de Tsipras, plantea desafíos logísticos por estar convocado según los expertos, con tanta prontitud, para el domingo día 5 de julio." En primer lugar, hay un desafío de organización y logística, organizando una votación así de rápida", dijo Arístides Hatzis, un profesor de derecho asociado y la economía en la Universidad de Atenas.
" El segundo problema es también la pregunta sobre si la oferta sobre la cual la gente votará todavía estará sobre la mesa en el momento del referéndum, " dijo el experto en una conversación telefónica el sábado.
Además, el medio señala que ningún documento de los que han discutido Grecia y acreedores europeos está traducido al idioma griego. Cabe indicar también que en el documento del referéndum, los ciudadanos votarán "No aprobado/NO" o "Aprobado/ SÍ" ante la propuesta de los prestamistas.
Sin embargo, para algunos ciudadanos "esto no es una decisión que tiene que hacer la gente" dijo Apostolia Tsopela y añadió: "Esto era para el gobierno para decidir en una de estas reuniones donde van a hacia adelante y hacia atrás. Ya deberían haber decidido".
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