• Carolina González empezó a la vez que el 'community manager' que se ha ido a la eléctrica
  • A diferencia de su predecesor, ella sí que es policía
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Las redes sociales de la Policía Nacional, que esta semana se quedaban 'huérfanas' ya que su 'padre', Carlos Fernández Guerra, anunciaba su marcha a Iberdrola, tienen nueva responsable. Se trata de Carolina González, una inspectora del cuerpo que lleva años encargándose, junto al 'community manager' que se ha ido a la eléctrica, de las cuentas de Twitter, Facebook e Instagram del cuerpo. Ahora tiene en sus manos mantener el éxito que ha alcanzado la Policía en las redes.

La Policía es el cuerpo más seguido del mundo y la institución pública más retuiteada del planeta

González, que a diferencia de su predecesor sí que es policía, comenzó a la vez que Carlos Fernández Guerra. Es decir, que también es cosa de ella el éxito que tienen las cuentas de la Policía Nacional. Ahora está en sus manos seguir la tónica marcada hasta ahora e ir mucho más allá, ya que el cuerpo se propone alcanzar los dos millones de seguidores este año. Además, debe mantener el estatus alcanzado: es el cuerpo policial más seguido del mundo y la institución pública más retuiteada del planeta.

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La propia cuenta de la Policía Nacional ha sido la encargada de anunciar este 'fichaje'. Como no podría ser de otra forma, y haciendo gala del humor que la caracteriza, ha dado a conocer el nombre de la nueva jefa.

Carolina González era una de las ocho personas que junto a Carlos Fernández Guerra llevaban las cuentas de la Policía, por lo que no es de extrañar que haya recaído sobre ella esta responsabilidad. Según recoge El País, empezó en esto allá por el 2006 como un juego, aunque ahora se confiesa una auténtica enganchada a las redes sociales.

Esta joven inspectora, de 46 años, tiene dos hijas y cuando no está buceando por Internet le gusta practicar running, afición que también comparte con su predecesor. Comenzó en un grupo de investigación en Barcelona y, con su Licenciatura en Periodismo bajo el brazo, se pasó a la comunicación en Madrid.

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“Siempre me ha gustado comunicar y la policía. Con este trabajo aúno mis dos pasiones y para mí es un lujo. No se me ocurre un mejor destino para mí”, ha dicho Carolina, que conoce la institución desde dentro y aplica sus conocimientos de comunicación a su trabajo en el gabinete de prensa de la Dirección General.

Sobre el equipo que lleva las redes sociales de la Policía, dice que más que un equipo son un grupo de amigos a los que les encanta este mundillo. “Somos compañeros de trabajo, pero sobre todo somos amigos y lo pasamos bien. La clave de nuestra labor y de nuestro éxito es esa y mantener la calidad de nuestros contenidos, que sigan siendo útiles. Los seguidores han venido por sí solos después y seguirán viniendo si seguimos haciendo una labor y un servicio que les resulte útil e interesante”, ha explicado.

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El equipo, mayoritariamente femenino -seis a dos- y con una media de edad que ronda los 30 años, está formado ahora por policías de diferentes escalas y con distintas titulaciones humanísticas, y todos pasan 24 horas enganchados a la red. Ahora sus principales retos, tras la marcha de Carlos Fernández Guerra, son “seguir innovando en formas de comunicación” y “buscar un contacto cada vez más directo con los seguidores que permita no sólo que conozcan nuestro trabajo y nuestras advertencias y consejos, sino que participen y colaboren en la lucha contra el delito”.

En estos momentos la cuenta de Twitter de la Policía tiene 1,75 millones de seguidores, tras ganar en los últimos 20 meses 1,5 millones de seguidores. Esto significa que crece a un ritmo de 2.000 'followers' por día. Asimismo, en Facebook el cuerpo de seguridad ha alcanzado los 300.000 amigos y en Instagram, donde sólo lleva un año, ya han superado los 52.000 usuarios, con 400 post.

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