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El juicio que enfrenta desde este lunes a Apple (-1%) con Epic Games es uno de los más importantes de la historia del sector. En juego: un pastel de 22.000 millones de dólares.
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¿Por qué van a los tribunales? Epic ha demandado a Apple porque afirma que empresas como los de Cupertino, Google y Sony, que se llevan un porcentaje de las ventas de las aplicaciones en sus dispositivos, no tiene derecho a beneficiarse de la labor de sus trabajadores.
Si Epic gana, un terremoto sacudirá la industria. Una vez establecido ese precedente, cualquier otra empresa puede argumentar lo mismo y reclamar a Apple, Google y compañía que no se lleven ese porcentaje por 'acoger' sus apps dentro de sus tiendas digitales, como la App Store.
¿Qué puede ganar el consumidor con todo esto? Poco o nada. Los expertos aseveran que, incluso si Epic gana y su caso sienta jurisprudencia, es poco probable que estas empresas ofrezcan sus apps un 20% o un 30% más baratas, que es el porcentaje que se suelen llevar Apple y el resto hasta el momento por ser el 'escaparate' de estas.
