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Microsoft ha vuelto a romper todas las previsiones en sus resultados trimestrales generando unos ingresos récord en un año que continúa marcado por la pandemia del coronavirus. Sus ingresos para este perioio han ascendido hasta los 41.710 millones, un 19% más que en el mismo periodo del año anterior, frente a los 41.030 millones dólares pronosticados por el mercado. Es el mayor crecimiento trimestral desde 2018. Además, sus acciones han registrado un BPA de 1,95 dólares.
La compañía de software está manteniendo unas espectaculares tasas de crecimiento gracias en parte a su negocio en la nube. Tanto que los ingresos de Azure crecieron en 2020 un 50%. También se ha visto muy beneficiada por venta de ordenadores a raíz del auge de los confinamientos y el teletrabajo. Pese a las cifras, los inversores aprovechan para recoger beneficios y sus títulos caen más de un 2% en la preapertura de Wall Street.
“Más de un año después de la pandemia, las curvas de adopción digital no se están desacelerando. Se están acelerando y es solo el comienzo”, ha explicado Satya Nadella, director ejecutivo de Microsoft. "Estamos construyendo la nube para la próxima década, expandiendo nuestro mercado direccionable e innovando en cada capa de la pila tecnológica para ayudar a nuestros clientes a ser resilientes y transformarse".
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El buen momento que está viviendo también puede observarse en su cotización. Sus acciones cotizan muy cerca de máximos históricos y está a las puertas de conquistar los dos billones de dólares de capitalización bursátil.
José María Rodríguez, analista técnico de Bolsamanía, explica que Microsoft se ha confesado ante el mercado este martes "con la cotización en máximos históricos, o lo que es lo mismo en subida libre. Y, además, a las puertas de superar los 2 trillones de dólares de capitalización bursátil, que son nuestros billones".
Las caídas en el 'after hours' alejan a la compañía de los 2 billones de capitalización, un honor que por ahora solo ostenta Apple, que capitaliza en los 2,25 billones.
