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La energética francesa Engie cerró el primer semestre de 2022 con un beneficio neto de 5.012 millones de euros, lo que supone elevar a más del doble las ganancias frente a las registradas en el mismo periodo del año anterior, según ha informado este viernes la empresa.
La facturación entre enero y junio fue de 43.167 millones de euros, un 72,3% más. Por segmentos de negocio, el área de gestión global de energía y de generación nuclear facturó 20.077 millones, un 134% más, mientras que la rama de suministro eléctrico avanzó un 69,3%, hasta 8.169 millones.
La división de soluciones de energía facturó un 18,5% más, hasta 5.587 millones, mientras que el área de redes se mantuvo prácticamente estable en 3.650 millones. El segmento de generación térmica aumentó un 90% sus ingresos, hasta 3.222 millones, mientras que el negocio de renovables observó unos ingresos de 2.485 millones, un 60,4% más.
Las compras de materia prima y los derivados operativos supusieron un coste de 27.685 millones, un 80,8% más, al tiempo que los costes de personal se contrajeron un 1%, hasta 3.903 millones de euros, y los impuestos especiales sobre su actividad energética fueron de 1.520 millones, un 68,3% más.
