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El Ibex 35 se ha animado a media sesión y ha rebotado un 2,07%, hasta 6.585 puntos, gracias a la cercanía de una posible vacuna y por buenos datos económicos del sector manufacturero. Tras cerrar octubre con una fuerte caída mensual del 4% (durante última la semana se desplomó un 6,4%), el selectivo español acumula una bajada superior al 30% en lo que va de año; y los expertos no descartan una recaída hasta sus mínimos anuales de 5.800 puntos.
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Wall Street también rebota cerca de un 1% después de cerrar el mes de octubre con caídas destacadas, aunque las bolsas asiáticas han iniciado la semana con ganancias, gracias a buenos datos económicos en China, país que sigue recuperándose de la crisis mejor que el resto de naciones.
En Europa y España, los datos de octubre del sector manufacturero también han sido buenos, aunque no incluyen las nuevas medidas restrictivas de los últimos días.
Este lunes, los inversores tienen la vista puesta en dos factores. La segunda ola del coronavirus en Europa, que ha provocado un nuevo confinamiento en Reino Unido hasta el 2 de diciembre; y las elecciones presidenciales del martes en Estados Unidos.
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Sobre la preocupante evolución de la pandemia, el mercado ya está descontando que afectará más de lo esperado a la recuperación registrada en el tercer trimestre, y que incluso puede provocar una recaída económica grave si la incidencia del virus sigue muy elevada durante los próximos meses.
No obstante, como factor positivo, Josep Baselga, director del área de Investigación y Desarrollo de Oncología de AstraZeneca, prevé que las vacunas contra el coronavirus estén en una "fase avanzada de distribución" para finales del primer trimestre del próximo año.
Y sobre las elecciones americanas, aunque Joe Biden lidera las encuestas, hay mucha incertidumbre sobre el resultado final y sobre cuándo lo conoceremos, debido a que más de 90 millones de americanos han votado por correo. The New York Times ha alertado sobre posibles conflictos civiles si Trump pierde.
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"Las elecciones de Estados Unidos dominarán la semana. La carrera por el Senado es lo más importante y tendrá el mayor impacto en los mercados. Un Senado republicano será un resultado negativo inmediato, pero probablemente el mejor resultado para los mercados de valores a largo plazo. Un estímulo fiscal masivo e impuestos mucho más altos estarán fuera de la mesa en este escenario", afirma Jeffrey Halley, analista de OANDA.
Los inversores consideran más probable un triunfo de Biden, aunque también están muy pendientes de si los demócratas retoman el control del Senado, lo que facilitaría mucho la agenda política de Biden en caso de que acceda a la Casa Blanca.
Además, tras las elecciones se reunirá la Reserva Federal (Fed), que publicará su comunicado sobre política monetaria este jueves. No se esperan nuevas medidas de estímulo económico, pero sí un compromiso para actuar cuando sea necesario y una nueva petición de Jerome Powell para que el Congreso apruebe un nuevo plan de medidas fiscales y económicas contra la pandemia.
En otros mercados, el petróleo Brent sube un 0,3%, mientras el euro se deprecia un 0,1% y se cambia a 1,1627 dólares. Además, la onza de oro avanza un 0,2%, hasta 1.884 dólares. Por último, la rentabilidad del bono español a 10 años se sitúa en el 0,14%; y la prima de riesgo española comienza la semana en 76 puntos.
ANÁLISIS TÉCNICO
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Lo único a lo que agarrarse en el muy corto plazo es a los importantes niveles de sobreventa diarios que podrían perfectamente provocar una reacción alcista en forma de rebote. Pero nada más. La tendencia es bajista en todos los plazos, sobre todo en lo que al medio y largo plazo se refiere. Tenemos el precio cerca de la base del canal bajista (por definición soporte), ahora en los 6.200 puntos. Como resistencias más inmediatas tenemos la resistencia (antes soporte) de los 6.560 puntos y por encima el hueco bajista diario de los 6.650 puntos. Y la parte alta del canal, ahora en las inmediaciones de los 7.000 puntos. En cualquier caso, el daño ya está hecho en el sentido de que la semana pasada el precio volvía a construir un nuevo mínimo decreciente, dando así continuidad a la impecable sucesión de máximos y mínimos decrecientes. Y así es imposible subir. Lo que deja la puerta abierta a que más pronto que tarde nuestro Ibex termine probando de nuevo la fortaleza del soporte que tenemos en los mínimos de marzo, los mínimos anuales en los 5.814 puntos.
