• Populares y socialistas instan al presidente del Parlament a que inicie una nueva ronda de contactos para proponer un nuevo candidato
  • Los partidos estarán muy pendientes de los movimientos del Tribunal Constitucional de la semana próxima
ep primera reunionroger torrentcarles puigdemont en bruselas
Primera reunión de Roger Torrent y Carles Puigdemont, en Bruselas@JUNTSXCAT

La parálisis institucional en la que se halla sumida Cataluña no tienen visos de superarse. ERC y Junts per Cataluña siguen deshojando la margarita de Puigdemont y el presidente del Parlament, Roger Torrent, les da juego con decisiones que levantan ampollas y siembran el descontento. Entretanto, PSC y PP reclaman al republicano que emprenda una nueva ronda de contactos para desatascar la investidura, ante el callejón sin salida al que Carles Puigdemont ha abocado, un vez más, a Cataluña.

Ciudadanos se ha unido a estas peticiones y su líder, Inés Arrimadas, ha propuesto la celebración de un pleno extraordinario para abordar la incertidumbre que hay en Catalunya y para "desbloquear" la situación generada tras el aplazamiento del pleno de investidura, “que se podrá llevar adelante si obtiene el apoyo de más partidos”, explica Raúl Moreno, diputado del PSC.

El objetivo de esta reclamación del bloque unionista es que Torrent dé la sesión plenaria del 30 de enero por fallida y active “de manera formal los dos meses de plazo que tenemos desde la primera sesión de investidura hasta la convocatoria de elecciones automáticas”, explica Moreno, si se confirma que no hay un candidato que tenga suficientes apoyos.

“Estamos a la espera de ver qué dice el presidente del Parlament”, agrega, “Nos encontramos en ‘stand by’, al igual que en las últimas semanas”, se lamenta el representante de los socialistas.

“Estamos a la espera de ver qué dice el presidente del Parlament”. “Nos encontramos en ‘stand by’, al igual que en las últimas semanas”.

¿NUEVA RONDA DE CONTACTOS?

La resolución de los letrados del Parlament de que la cuenta atrás para la investidura no ha empezado a correr porque no ha habido ninguna votación fallida, dejó exclusivamente en manos del republicano el poder de desbloquear la legislatura. Pero, lejos de ceder a la lluvia de reclamaciones para que dé 'cuerda al reloj', Torrent ha optado por salirse por la tangente llevando la investidura al Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo, una decisión que ha levantado ampollas en el bloque soberanista.

Tampoco están contentos con sus dilaciones en el bloque constitucionalista Xavier García Albiol y, con anterioridad Miquel Iceta, han enviado sendas cartas, este lunes y este miércoles al presidente del Parlament recordándole su deber de “hallar una salida legal y posible en el bloqueo en que se ha instalado el Parlament”.

Además, el PP ha vuelto a poner presión sobre la líder de Ciutdadanos, Inés Arrimadas, para que se presente como candidata a la presidencia de la Generalitat -a pesar de que no tiene suficientes apoyos, los populares quieren que tome la iniciativa para que empiece la cuenta atrás hacia las urnas-. La respuesta a las apremiantes demandas de los populares, manifestadas por boca de buena parte de la plana mayor del partido, la ha dado líder de la formación naranja, Albert Rivera, que ha dejado claro que Arrimadas “no va a salvarle la papeleta a los independentistas”.

No escapa a nadie la estrategia del partido de Mariano Rajoy de desgastar a su depredador natural de votos. En este sentido, Ignacio Martín Grandos, politólogo y miembro del consejo directivo de la Asociación de Comunicación Política (ACOP), subraya que “los intereses partidistas que mueven a los populares”. Explica que, a sabiendas de que el fracaso está asegurado por no sumar suficientes apoyos -los comunes han reiterado que no apoyarán una candidatura de Arrimadas-, incrementan el asedio contra sus rivales.

Albiol, por su parte, tampoco está por la labor de dar un paso al frente. En recientes declaraciones, el líder del PP catalán ha dejado claro que su hipotética candidatura "tendría que ser de las últimas" opciones que se planteen y ante una "situación límite". El partido ha contemplado esta opción para que empiece a sonar el ‘tic-tac’ del reloj hacia unas nuevas elecciones en primavera.

Rivera no quiere que Arrimadas salve la papeleta a los independentistas y Albiol no está por la labor de dar un paso al frente

EL PAPEL DEL TRIBUNAL CONSTITUCIONAL

Pero el desenlace podría precipitarlo otro actor: el Tribunal Constitucional (TC). El alto tribunal tiene en su poder los informes presentados, por un lado, por el Parlament de Cataluña, Carles Puigdemont y los diputados de Junts per Catalunya (JxCat) y, por otro, por la abogacía del Estado para poder resolver si admiten a trámite el recurso del Ejecutivo de Mariano Rajoy contra la investidura de Carles Puigdemont.

La próxima semana, el TC podría deliberar el asunto y, como parece probable, admitir el recurso del Gobierno que paraliza de forma automática la propuesta de nombramiento de Puigdemont, aunque ya este cautelarmente suspendida. Los magistrados también tendrán sobre la mesa la cuestión de “si el pleno que no se celebró permite que empiece la cuenta atrás, sin embargo el informe de los letrados del Parlament considera lo contrario”, recuerda Moreno.

Pero el texto de los juristas insiste en que sea el Constitucional quien aclare en última instancia la disyuntiva cuando admita a trámite la impugnación del Gobierno, puesto que fue el encargado de vetar una posible votación de investidura del candidato inicialmente designado. No obstante, el diputado socialista no cree que el alto tribunal “se pronuncie sobre este asunto, sino sobre si la propuesta de investir a Puigdemont a distancia o de cualquier otra manera que no sea presencial es factible”. El socialista es de la opinión que “lo tienen perdido”.

TORRENT, ENTRE LA ESPADA Y LA PARED

Los expertos no esconden su asombro ante el escenario inédito en el que “todos los actores se han salido de sus papeles fijados por el marco del Estatuto de Cataluña y la Constitución”, explica Jordi Pacheco i Canals, decano del Col·legi de Politòlegs i Sociòlegs de Catalunya (Colpis). Un momento en el que las instituciones, especialmente la Moncloa y el Parlament de Catalunya, juegan en terreno desconocido y las “normas que presuntamente las rigen pierden sentido”, avisa el analista político.

“ERC ha jugado sus cartas para lograr una alternativa a Puigdemont, pero públicamente manifestó su disposición a apoyar a la lista más votada de los tres partidos independentistas, por lo que está atrapada”

El ‘ni conmigo ni sin mi’ del expresident de la Generalitat y las polémicas decisiones de Torrent han provocado el enésimo cisma entre Esquerra Republicana y Junts per Cataluña que, sin embargo, han logrado reconducir sus negociaciones. “ERC ha jugado sus cartas para lograr una alternativa a Puigdemont, pero públicamente manifestó su disposición a apoyar a la lista más votada de los tres partidos independentistas, por lo que está atrapada”, argumenta el politólogo.

Pacheco i Canals también explica las actuaciones del presidente de la cámara catalana como respuesta a la presión inédita del Gobierno sobre un parlamento que “representa la voluntad democrática de los ciudadanos”. En estos momentos, agrega, es “prisionero de su función en la formación de Gobierno que es proponer un candidato después de las consultas con los partidos”.

Pone de relieve el decano del colpis que Torrent se halla entre la espada y la pared. “Si el president de la cámara catalana hace caso del Ejecutivo y de los partidos unionistas e inicia una nueva ronda de contactos, estará alterando los fundamentos y voluntades del organismo que representa”, aduce. En definitiva, “se situará fuera de sus funciones”, añade.

Para el experto, la solución pasa por “un pacto político para desatascar la situación entre todos”. Pero no es nada optimista y señala que “en la situación actual todo es posible ya que los participantes conducen sin freno y han entrado en caída libre por lo que no podemos acogernos a las convenciones normales”.

Noticias relacionadas

contador