Las bolsas de la región Asia-Pacífico han cerrado con signo mixto esta primera sesión del mes de abril. Mientras que en China los mercados han terminado en positivo, en Japón el rojo se ha impuesto. Los datos del sector manufacturero han tenido la culpa.
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Según la Oficina Nacional de Estadísticas de China, la actividad manufacturera se expandió en marzo, con el índice de gerentes de compras registrando una lectura de 50,8 en el tercer mes del año, frente a la lectura de febrero de 49,1. El consenso de economistas, de hecho, esperaba un 49,9, lo que aún representaba una contracción en el sector.
Pero también se ha conocido encuesta de manufactura global de Caixin para marzo, según la cual la actividad de las fábricas en el gigante asiático se expandió a su ritmo más rápido en 13 meses. En concreto, la lectura del PMI se situó en 51,1, por encima de las expectativas de 51.
Con estas cifras sobre la mesa, el índice CSI 300 de China ha subido un 1,5%. Sin embargo, el Nikkei 225 de Japón ha perdido un 1,4%, perdiendo la marca de 40.000 puntos al cerrar en 39.803,09, mientras que el Topix se ha dejado un 1,71% hasta los 2.721,22 enteros. Y es que en Japón, la actividad de las fábricas se ha contraído por décimo mes consecutivo.
El índice de gerentes de compras del sector manufacturero que elabora el S&P Global au Jibun Bank Japan se situó en 48,2 en marzo. "El desempeño del sector manufacturero japonés siguió siendo pesimista al final del primer trimestre de 2023, aunque había señales de que lo peor de la debilidad había pasado", destaca la encuesta.
Y además, el optimismo empresarial entre los grandes fabricantes japoneses cayó en el primer trimestre, según la encuesta Tankan del Banco de Japón, con el indicador en +11 en comparación con +12 en la última encuesta. El consenso esperaba una lectura de +10.
Los mercados de Australia y Hong Kong están cerrados por el Lunes de Pascua. Sin embargo, El Kospi de Corea del Sur subido un 0,04% a 2.747,86 puntos y el Kosdaq de pequeña capitalización ha ganado un 0,77% y ha cerrado en 912,45 enteros, y eso que la actividad de las fábricas del país se contrajo en marzo tras dos meses consecutivos de expansión.
El índice de gestores de compras de Corea del Sur se situó en 49,8 en el tercer mes del año, frente al 50,7 de febrero. Según S&P Global, esto se atribuye en gran medida a una demanda moderada y planes de inversión degradados, sin olvidar que "varias empresas mencionaron que las ventas se mantuvieron débiles en medio de la debilidad de la economía nacional en particular".
