ep archivo   una persona pagando con tarjeta
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El dinero en metálico tiene los días contados. O eso es, al menos, lo que opina ya el 80% de compradores y comercios: que el efectivo está condenado a desaparecer. Parece ser que esta forma de pago no tiene nada que hacer frente a rivales como la tarjeta o el móvil, que se han convertido en los medios favoritos de los consumidores españoles, creciendo su uso desde que comenzara la pandemia del Covid-19.

De hecho, un 64% de los españoles ha aumentado el pago con tarjeta tradicional, ya sea de crédito o de débito y un 47,6% utiliza más ahora que antes la tarjeta 'contactless', según se desprende del último informe sobre el futuro de los medios de pago elaborado por UniversalPay.

El pago con tarjeta es la forma favorita para efectuar compras habituales para casi el 75% de los compradores encuestados y para el 86,4% es la forma más segura de realizar transacciones. Mientras, las transacciones con tarjetas sin contacto han experimentado un fuerte impulso, con más de un 30% de aceptación. De los compradores que prefieren el 'contactless', casi el 80% considera que los pagos sin contacto contribuyen a minimizar los riesgos de contagio en los comercios. A esta seguridad sanitaria se le añade la seguridad transaccional, ya que el 63,2% de los compradores perciben este método de pago como muy seguro.

El pago móvil comienza a despuntar cada vez más. Es uno de los métodos que más ha crecido con la pandemia y que está llamado a ser el más popular en el corto y en el medio plazo. En un año, su uso se ha incrementado más de cuatro puntos. Hasta el 21% de los consumidores encuestados hacen uso del pago móvil en tienda, un método con una percepción de seguridad del 57,8%. De ellos, el 41% de los compradores usa el 'wallet' de su banco, seguido de Apple Pay, Google Pay y Samsung Pay.

"Esta nueva situación de crisis ha acelerado la digitalización de los comercios y, por supuesto, el desarrollo de los pagos electrónicos en las tiendas virtuales, así como la consolidación de los mismos en los establecimientos físicos. Todo ello se ha visto favorecido por las recomendaciones sanitarias y por la implementación de una tecnología más segura, más rápida y más intuitiva", asegura la firma de soluciones de pago.

A la hora de hacer transacciones online, los usuarios se decantan principalmente por la tarjeta, con un 67% de aceptación, seguido de PayPal, con un 27,3%. Por su parte, los monederos virtuales empiezan a cobrar cada vez más importancia entre los consumidores, sobre todo desde la popularización de Bizum, que se puede implementar en las apps de pago de la mayoría de las entidades bancarias, permitiendo el pago instantáneo también en cualquier comercio online que lo tenga habilitado.

DIGITALIZACIÓN DE LA BANCA

Otra muestra más de que el dinero en efectivo cada vez está menos presente viene de la digitalización de la banca y la aparición en la escena financiera de aplicaciones que facilitan el pago entre particulares. La retirada de efectivo ha caído en picado en relación a años anteriores y, según un estudio del portal de ayuda financiera mejor-banco.com, para tan solo un 35% de los usuarios esto está dentro de sus operaciones bancarias más usuales, lo que afianza la idea de que estamos ante el principio del fin del dinero físico.

Además, Bizum se ha convertido en uno de los servicios estrella de la banca, no solo para enviar dinero entre usuarios, sino también para realizar compras por Internet. Para casi el 43% de los encuestados el pago con Bizum es una de las tres operaciones más frecuentes que llevan a cabo. El auge del comercio electrónico ha acelerado también el avance de la caída del uso del efectivo, la vía preferida para pagar online sigue siendo la tarjeta de crédito (65%), seguida de otros métodos de pago como PayPal (57%).

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